El desierto como escritura
En la literatura hay un momento fundamental que es cuando ciertos autores comienzan a observar que fuera de sus casas, pasando las fronteras o mejor dicho en el desierto se comienza a formar una gran fuente de inspiración y creación para la literatura del porvenir.
Para muchos autores el desierto se convirtió en una metonimia de utopía, el sitio donde no ha ocurrido el tiempo, la historia, y en donde es posible empezar de nuevo, descargarse de los errores del pasado y recomenzar.
Este espacio de creación y de regeneración les sirvió a muchos autores para crear sus obras ya que vieron en ese espacio vacío una oportunidad para rellenarlo como más les guste, ya sea con una intención política, filosófica o puramente ficcional.
En la Argentina uno de los autores que trabajo el desierto como fuente de inspiración y para describir al “otro” de la barbarie fue Sarmiento con su “Facundo”.