Muchos autores aman escribir y entregan su vida, su cuerpo, su alma a la escritura, pero hay autores que no piensan lo mismo. Sobre eso hay una graciosa anécdota entre Philip Roth y Julian Tepper.
Cuanta Tepper que él trabajaba en una tienda de alimentos en Estados Unidos, un lugar al que solía ir Philip Roth. Tapper al ser un gran admirador de Roth le regaló, una vez que fue por un bocadillo, un ejemplar de su primera novela titulada “Balls”. Roth aceptó encantado el regalo pero lo dijo lo siguiente: “Yo lo dejaría ahora que puedes. De verdad. Es un campo horrible. Tortura. Escribes y escribes, y entonces tienes que tirar la mayor parte porque no está a la altura. Yo te diría que lo dejases ahora. No quieres hacerte esto a ti mismo. Este es mi consejo.”
A lo que Tapper respondió “Es demasiado tarde, señor Roth. Ya no hay vuelta atrás. Estoy dentro.”