Victoria Ocampo, gracias a todas esas características, se convirtió en una de las mujeres más interesantes de la Argentina junto con su hermana Silvina Ocampo, mujer del escritor Adolfo Bioy Casares. De hecho entre ambas no había una excelente relación ya que según su círculo cercano había muchos celos de ambas. Esto se decía porque Silvina alcanzó un éxito muy grande gracias a sus relatos cosa que Victoria nunca alcanzó ya que su escritura se basaba en testimonios de su vida más que en grandes obras literarias. Si bien Victoria tenía los contactos y la fama, Silvina, sin lugar a dudas, tenía ese encanto literario que le faltó siempre a Victoria y que probablemente le envidió. Es más Victoria como fundadora de una de las revistas literarias más importantes de la Argentina, “Sur”, publicó el primer libro de cuentos de Silvina pero lo critico raudamente, algo que molestó mucho a su hermana menor.
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