Adiós a Elsa Bornemann

El mundo literario infantil tuvo una gran perdida, ya que el 23 de mayo del 2013 murió Elsa Bornemann, la escritora galardona y especializada en literatura infantil y juvenil, nacida en Argentina. Fue el sello Alfaguara que a través de sus agentes de prensa dio a conocer la triste noticia, ya que la autora tenía contrato con esa editorial española. El comunicado de Alfaguara decía: “Estamos profundamente doloridos por su    fallecimiento, se trata de una de las autoras más importantes de la literatura infantil y juvenil hispanoamericana. Como sus editores y amigos, lamentamos profundamente esta gran pérdida. Siguen con nosotros su obra y su recuerdo, que nos acompañarán siempre”.

Elsa Isabel Bornemann nació el 15 de febrero de 1952 en Buenos Aires. Entre sus libros más destacados está “Un elefante ocupa mucho espacio”, el cual fue uh cuento para niños que cargó con la censura de la última dictadura militar en su país, aunque años más tarde sería distinguida con el Premio de honor Hans Christian Andersen.

Elsa Bornemann se destacó por su compromiso social y político desde la literatura infantil y juvenil ye se fue su estandarte durante toda su carrera. Murió a los 61y dejó un vacío que será difícil de llenar, ya que fue profesora de Letras en Argentina, Europa y Japón, coordinó talleres de lectura y escritura y presentó su libro “El libro de los chicos enamorados” en varios países del mundo y estuvo entre los cinco mejores libro escritor de lengua hispana.

Entre otros libros escribió “El último Mago” y “Bilembambudín y Disparatario” “Caramelos surtidos”. Se interesó por la literatura oriental. El título de su libro “Un elefante ocupa mucho espacio” estuvo inspirado en la canción infantil que dice: «Un elefante ocupa mucho espacio/ dos elefantes ocupan mucho más/ Dos elefantes ocupan mucho espacio/ tres elefantes ocupan mucho más», y así hasta el infinito”.

Que triste noticia la de la muerte de la escritora más importante que ha tenido el Argentina. No sólo ha creado cuentos que han movilizado a miles de jóvenes, que han sido prohibidos en la dictadura, sino que ha conmovido a niños y adultos durante muchos años con sus historias.
La escritora, prohibida en la dictadura militar Argentina, era doctora en letras. Su sensibilidad y su conocimiento por las letras la ah llevado a convertirse en una de las escritoras más importantes en el género infantil y juvenil. De hecho, cuando Elsa Bornemann comenzó a escribir rondaban los años 70, una década sangrienta y triste de nuestro país. Desde ese lugar, frente a ese contexto opresor, la escritora publicó las mejores obras que han marcado no solo su trayectoria para siempre sino que le han abierto la cabeza y el corazón a miles de jóvenes. Entre esos libros se encuentran: “Un elefante ocupa mucho espacio” “Socorro” y “El espejo distraído”.

“Un elefante ocupa mucho espacio”, como bien se ha dicho, ha sido un libro prohibido durante la dictadura Argentina porque poseía, según los censuradores, tintes que revelaban la postura de la autora frente a esa década de miedo y sangre. Por ello es que a continuación y a modo de homenaje me gustaría compartirles el comienzo de su obra
“Que un elefante ocupa mucho espacio lo sabemos todos. Pero que Víctor, un elefante de circo, se decidió una vez a pensar 'en elefante', esto es, a tener una idea tan enorme como su cuerpo... ah... eso algunos no lo saben, y por eso se los cuento:
Verano. Los domadores dormían en sus carromatos, alineados a un costado de la gran carpa.
Los animales velaban desconcertados. No era para menos: cinco minutos antes el loro había volado de jaula en jaula comunicándoles la inquietante noticia. El elefante había declarado huelga general y proponía que ninguno actuara en la función del día siguiente.”

Ha sido realmente una noticia muy triste para todos los argentinos, niños o adultos que disfrutaron y disfrutan aún hoy en día de los cuentos de ésta fantástica autora. A mí me ha dolido enterarme su muerte, aunque sé que es inevitable, todos moriremos en algún momento, a veces uno cree que hay gente que jamás va a morir y creo que en eso no nos equivocamos. ¿Qué quiero decir con esto? Que escritores como Elsa Bornemann no mueren nunca, por el contrario su muerte los eterniza en la memoria de todos los niños, jóvenes o adultos que leen sus libros. En cada lectura, en cada recuerdo vuelve aparecer ésta fantástica escritora.
Por ello, vuelvo a decir, que su muerte no hace más que lograr que su voz, su escritura, su poesía y su obra se eternicen para siempre. Por ello lo fundamental para que ésta autora viva para siempre es que evitemos olvidarla, recordémosla siempre así su obra vivirá en todos eternamente.