Antón Chéjov y el drama dentro del drama

Antón Chéjov fue un dramaturgo y escritor ruso del cual han sido representadas miles y miles de sus obras a lo largo de todo el mundo. Su dramaturgia y sensibilidad narrativa sirvió de inspiración e influencia para muchos actores y dramaturgos que se valieron de su drama para crear sus obras.
“La gaviota” es una de las obra más ricas estructural y narrativamente que compuso Chéjov. La historia se sumerge en una representación representada, en un drama dentro de un drama, o dicho de otro modo en una actuación dentro de una actuación. Es muy interesante cuando una obra de teatro representa teatro dentro del teatro. Muy parecido al teatro dentro del teatro de la escena isabelina.
En resumen, la obra de Chéjov narra la historia de cuatro personajes y de cómo se representa en una actuación a través de la ficción dramática.

“La Gaviota” es una de las numerosas obras de teatro que escribió el genial Antón Chèjov y se encuentra entre las cuatro narraciones teatrales más destacadas del escritor ruso.

Con ribetes impactantes del melodrama francés, el escritor hizo de este relato una tragedia pero diferente a las conocidas hasta el momento de su aparición, ya que, por ejemplo, los suicidios y las muertes no ocurrían en el escenario sino entre bambalinas.

El amor y los dramas que se suscitan a raíz de sentimientos no correspondidos o relaciones imposibilitadas de materializarse, hay cuatro protagonistas principales que se debaten sobre las tablas y son: una niña inocente llamada Nina; la actriz venida a menos, Irina Arkádina; un escritor novato de guiones teatrales de nombre Konstantín Tréplev y un escritor de gran renombre llamado Trigorin.

Cuando se estrenó la obra el escritor sintió que fue un verdadero fracaso y no quiso salir al público al finalizar el último acto, pero al poco tiempo leyó críticas inmejorables en los diarios, lo que lo llevó a volver a presentarla en nuevos teatros.

“La Gaviota” se presentó en otros escenarios nacionales e internacionales y fue llevada también a los principales teatros españoles en diferentes e incontables representaciones. Una de ellas fue en el año 1963, cuando el director Alberto González Vergel la presentó en el teatro Valle Inclán de Madrid.

Pero también acaparó la pantalla chica, cuando el mismo director español realizó una adaptación pata la televisión y en 1967 se emitió por los canales de España, lo que se repitió en 1972.

Tambiens e realizó una puesta en el año 1981 en Madrid, otra en el 2004, dirigida por Amelia Ochandiano y una reciente interpretación de la obra en el año 2012, que contó con los artistas Toni Acosta, Javier Pereira, Irene Visedo y pepe Ocio, entre otros.

De aquel primer estreno que el autor creyó que había sido un fracaso, la obra tuvo innumerables versiones en distinto teatros del mundo y dirigida por los expertos más destacados del teatro internacional.

Otra de las obras de teatro de Antón Chèjov que se encuentran entre las más importantes de su producción es “El jardín de los cerezos”. Es una comedia que habla sobre la decadencia de la clase noble y aristócrata de Rusia en las últimas décadas del siglo XIX.

Para recrear esta historia, Chèjov lo hace a través de las vivencias de una familia ruso que está atravesando un momento económico catastrófico pero que no tiene miedo alguno por ello y que actúa como si no le importara, ya que entre las cosas que perderán está su gran mansión a la que llamaron “El jardín de los cerezos”.

Uno de los personajes esboza una estrategia y es la de convertir a la gran mansión en una residencia de vacaciones. La historia que plantea el escritor ruso intenta mostrar que las grandes familias aristócratas podían padecer problemas cotidianos como cualquier ciudadano común.