Tirso de Molina

Biografía de Tirso de Molina

Tirso de Molina nació en el año 1571 en la ciudad de Madrid.

Fue un monje de la orden de la merced y su verdadero nombre era Fray Gabriel Téllez, pero para sus obras utilizaba a la hora de firmar el pseudónimo de Tirso de Molina.

Viajó a Santo Domingo como misionero contando con 45 años y hasta los 47 estuvo allí. Después regresó a Madrid pero en 1625 los reformistas lo atacaron por el carácter profano de sus obras.

Un año más tarde en el convento de Trujillo lo nombran comendador y poco a poco escapa de lo profano en sus obras, llegando a escribir la Historia General de la Orden de la Merced.

Desempeñó después diversas labores hasta que en el año 1648 fallecía en Almazán.

Gran autor, y muy Lopesco por cierto.

Le encantaba la comedia nueva, en la que Lope había despuntado, pero introdujo en ella algunas novedades más intelectuales.

Le gustaba ahondar en la psicología de sus personajes y especialmente en los femeninos, los cuales además de estar muy bien trazados eran valerosos, audaces e inteligentes.

Es por ello que pocos autores han creado personajes tan memorables como los que el bueno de Tirso dio a luz.

Además se considera que Tirso de Molina es el padre de la comedia de enredo, que tanto auge tuvo en España en años posteriores.

Tirso no se cortaba tampoco a la hora de criticar, ya sea al gobierno, la los políticos o a los cortesanos corruptos.

Estas son sus obras más destacadas:

Comedias de enredo: Don Gil de las calzas verdes, La celosa de sí misma, Marta la piadosa...

Comedias palatinas: El vergonzoso en palacio, Amar por señas, Celos con celos se curan...

Dramas bíblicos: La mujer que manda en casa, La venganza de Tamar, La mejor espigadera...

Comedias de santos: La dama del olivar, la Santa Juana...

Tragicomedias: El burlador de Sevilla o el convidado de piedra.

Comedia mitológica: Aquiles

Autos sacramentales: El colmenero divino, Los hermanos parecidos, El laberinto de cera.

La obra más conocida de Tirso de Molina es el burlador de Sevilla, también conocida como El convidado de piedra.

Se ha discutido la autoría de esta obra que constituye la primera aparición del Don Juan en nuestra literatura, el cual posteriormente fue un mito usado a nivel mundial.

La obra trata de los engaños de Don Juan Tenorio a cuatro mujeres diferentes, dos de ellas nobles y las otras dos plebeyas.

Don Juan acaba invitando a cenar a una estatua funeraria de piedra de un hombre que había sido agraviado por sus líos amorosos. Ambos acuerdan cenar en casa de Don Juan un día y hacerlo al otro en la capilla. Al cenar en la capilla Don Juan es asesinado como venganza y condenado al infierno por sus pecados.

Pues a mí me ha gustado El Burlador de Sevilla. Lo tuve que leer hace algunos años y disfruté bastante. Para empezar hay que tener en cuenta que se trata de la primera vez que aparece el mito de Don Juan Tenorio, uno de los personajes más importantes de la literatura universal. El hecho de que esté escrito en verso puede dificultar su lectura con respecto a otros dramas con el mismo personaje, pero una vez acostumbrado a ello, creo que se hace muy llevadero. Siempre recuerdo la escena en la que Don Juan llega a la playa donde se encuentra a Tisbea. Está muy bien descrito el proceso de “ligue” que sigue Don Juan. Recuerdo que en el instituto nos reímos mucho con esta escena, sobre todo también gracias a las palabras de Catalinón, el personaje más gracioso de la obra, que un amigo mío tuvo que interpretar. Tan bien lo hizo, que a día de hoy todavía le llamamos así. :D

¡Qué largo me lo fiais!

¡Que maravilla, el Burlador! Lo leí hace un montón de años y suelo acudir a él cada poco. Creo que muchos de nosotros no nos damos cuenta de las enormes joyas que esconde la literatura española. La creación del mito de Don Juan es un verdadero hito de la literatura universal. Y el "Burlador" aunque en fase aun embrionaria es una fantástica obra de teatro. No hace mucho tuve la oportunidad de asistir a su representación por parte de una compañia amateur de teatro y me sentí como si fuese la primera vez. El caracter de Don Juan en la obra de Tirso es un verdadero arquetipo, mil veces copiado en obras posteriores. Aunque me gustaria señalar que en esta obra, a diferencia de otras, se arrepiente, en un último momento y justo ya a las puertas de su condenación eterna, se arrepiente, aunque sea tímidamente, cosa que no ocurre, por ejemplo en el célebre "Don Giovanni" de Mozart, ópera a la que también asistí :D hace un par de años y me enamoró. En fin, el Burlador, está lleno de detalles maravillosos y de personajes entrañables, como ese Catalinón amigo tuyo, Manolo ;)