Las mejores novelas eróticas de todos los tiempos

El erotismo, las novelas con tinte erótico, no es un género reciente sino que se remonta a largos años atrás en donde varios de los escritores más reconocidos a lo largo de todos los tiempos han escrito alguna que otra gran novela erótica.
Hoy en día las novelas eróticas han alcanzado una popularidad inimaginable gracias a uno de los libros de saga más leídos hoy en día y titulado como “cincuenta sombras de Grey” de la escritora británica E. L. James. Dicha novela y tantas otras, que hoy en día alcanzan popularidades extremas, toman al erotismo y la sexualidad como elementos constitutivos para crear y condimentar la trama.
Si bien eso es cierto, el erotismo no comienza con la saga de E.L James sino que nace de las raíces del Marqués de Sade, de la tinta de Marguerite Duras y de la pasión y el deseo de Vladimir Navokov, entre tantos otros.

El erotismo, la sexualidad, la pasión y el amor han sido siempre temas tabúes en las novelas de los autores, antes para escribir sobre erotismo y sexualidad había que tener bastantes agallas ya que no solo la crítica te censuraba sino que el mismo público lector no lo leí o no le interesaba o temían lo que podían salir de “esos libros málditos” que hablaban y narraban hechos eróticos, sexuales y sensuales.
Ha habido escritores que han salido de ese tabú sobre el erotismo y han creado alguna de las mejores novelas que han fundado uno de los géneros más leídos en el último tiempo, el género erótico en donde el deseo, la atracción, la pasión y el amor son los temas sobre los que tratan algunas de las mejores novelas eróticas de todos los tiempos.
Ha continuación les contaré cuáles han sido esas novelas eróticas que han fundado y creado uno de los géneros más famosos hoy en día, pero que tiene sus comienzos en obras históricas y famosas que les mostraré:

La primera novela erótica que les contaré nos remonta a los años 1949 en donde el gran escritor Henry Miller publicó su novela erótica titulada “Sexus”.
Si bien el libro más famoso y considerado una de las obras maestras de toda la literatura del siglo XX que tiene una trama y descripción sexual y erótico, de Henry Miller, es “Trópico de Cáncer”, “Sexus” no se queda atrás y es por ello que la consideramos una de las novelas eróticas más interesantes y poderosas de todo el siglo XX.
La novela narra la historia de un encuentro casual entre una joven bailarina y el protagonista, de dicho encuentro surge una ardiente y poderosa relación de siete largos años que desencadenara encuentros, desencuentros, oscuridades, abortos, orgasmos, tristezas y alegrías, una novela que les encantará leer y que fundó, sin lugar a dudas, uno de los géneros más leídos de los últimos tiempos.

Si bien “Sexus” forma parte de toda una trilogía de Henry Miller que incluye las otras dos novelas tituladas “Plexus” y “Nexus”, ha sido “Sexus” la que más me ha gustado. Por ello les comparto a continuación un fragmento de dicha novela erótica para que vean cómo describe y escribe éste gran autor la sexualidad, la sensualidad y el erotismo.
"Siempre que la belleza de la mujer se vuelve irresistible, se la puede rastrear hasta la única cosa que la produce. Esa cosa, con frecuencia un defecto físico, puede asumir proporciones tan irreales que en la mente del hombre que posee a esta mujer, anula la turbadora belleza. Un busto excesivamente atractivo puede convertirse en un gusano de dos cabezas que se mete en la mente y da origen a un misterioso tumor acuoso. Los tentadores labios demasiado carnosos pueden crecer en las profundidades del cerebro como una vagina doble, trayendo aparejada la enfermedad más difícil de la carne: la melancolía…"

“El jardín del Edén” de Ernest Hemingway, publicado en el año 1986, es otra de las grandes obras que ha fundado la literatura erótica en los últimos años del siglo XX. En dicha novela el gran escritor de literatura, Hemingway, relata el triángulo amoroso entre David Bourne y su mujer Catherine junto a la joven Marita a la cual introduce Catherine cuando disfrutan, ambos, sus vacaciones de recién casados en La Camarga, allí conocen a Marita y comienzan a vivir un viaje tan sensual de exploraciones, de amor, de placer y sexualidad que lleva la literatura de éste autor a otro nivel.
Realmente es una de las obras más sensuales que ha escrito Hemingway a lo largo de su vida y de hecho lo han convertido en uno de los tantos otros escritores que han fundado éste gran género erótico.

“Ada o el ardor” de Vladimir Nabokov es otra de las grandes novelas eróticas de todos los tiempos y que ha sido publicada en el año 1969, luego de publicarse una de las novelas más conocidas por el autor llamada “Lolita” con la que alcanzó una popularidad muy grande a lo largo de todo el mundo. Si bien su novela “Lolita” también es reconocida como una de las novelas eróticas del escritor ruso, su obra “Ada o el ardor” refleja aún más esa fantasía desbordada que trae de la novela anterior sobre el amor y el incesto. Ambas pasiones son las que relata de manera única y maravillosa éste gran escritor al presentar, en escena, a dos hermanos que pensaban que eran primos y se enamoran. Entre ambos surge una relación tan pasional y sexual que desborda todas las páginas de ésta gran novela.

He aquí el fragmento de la novela “Ada o el ardor” de Vladimir Nabokov. Observen como sus palabras, su lenguaje, logro convertir a toda su novela en una novela de las mejores novelas de género erótico.
"Su vestido ligero y flotante estaba tan abierto por la espalda que cada vez que la ahuecaba por un movimiento de sus omóplatos prominentes, Van, que se había aproximado al taburete tanto como se lo permitía la prudencia, podía ver hasta el coxis su ensilladura marfileña y respirar todo el calor de su cuerpo. Con el corazón saltándole en el pecho, y la mano lamentablemente hundida en el bolsillo del pantalón, se inclinaba sobre ella, mientras ella se inclinaba sobre su obra, y permitía a sus labios sedientos que se deslizasen ingrávidamente desde la cabellera tibia a la ardiente nuca. Era la sensación más dulce, más poderosa, más misteriosa que nunca había experimentado. En la sórdida lujuria del invierno anterior nada podía haberle hecho presentir aquella ternura acariciadora, aquel desconsuelo del deseo..."

Si vamos hablar de alguna de las mejores novelas eróticas que se ha publicado en el siglo XIX no podemos no mencionar la gran obra “El amante” de Marguerite Duras, publicada en el año 1864.
La gran escritora, junto a “El Amante” ha creado una de las novelas más hermosas que he leído jamás. La obra es una narración autobiográfica que tiene su escenario de acción en la Indochina Colonial, allí se cuenta la historia de la apasionante e intensa historia de amor entre una adolescente francesa de 15 años y un rico comerciante de origen chino de 26 años de edad. La obra, la historia en cuestión, derrocha en cada una de sus páginas una sensualidad y una sexualidad como nunca antes he leído en mi vida. De hecho la historia de la novela está basada en el encuentro real que tiene Marguerite Duras y Leo, un comerciante chino, mientras cruzaban el río Mekong en un transbordador, dicho encuentro, dicha sensualidad desencadenó en esta gran obra literaria, sensual y sexual.

Así comienza “El amante” de Marguerite Duras, una de las mejores novelas eróticas de todos los tiempos. Se los recomiendo.
Un día, ya entrada en años, en el vestíbulo de un edificio público, un hombre se me acercó.
Se dio a conocer y me dijo: "La conozco desde siempre. Todo el mundo dice que de joven era usted hermosa, me he acercado para decirle que en mi opinión la considero más hermosa ahora que en su juventud, su rostro de muchacha me gustaba mucho menos que el de ahora, devastado".
Pienso con frecuencia en esta imagen que sólo yo sigo viendo y de la que nunca he hablado. Siempre está ahí en el mismo silencio, deslumbrante. Es la que más me gusta de mí misma, aquélla en la que me reconozco, en la que me fascino.
Muy pronto en mi vida fue demasiado tarde. A los dieciocho años ya era demasiado tarde. Entre los dieciocho y los veinticinco años mi rostro emprendió un camino imprevisto. A los dieciocho años envejecí. No sé si a todo el mundo le ocurre lo mismo, nunca lo he preguntado.

“Jin Ping Mei de El Erudito de las carcajadas” es una de las novelas más representativas de la literatura erótica china, su autor es anónimo y tampoco se conoce cuál ha sido la fecha exacta de su publicación aunque algunos estudiosos afirman que ha sido a finales del siglo XVI dónde ésta gran novela se ha publicado. Más allá de no saber quién ha sido su autor y cuándo se ha publicado, lo interesante de ésta novela es la forma de narrar el modo de vida que empleaba la china clásica en épocas de corrupción. De hecho la novela tiene un tinte bastante moralizante por un lado y por el otro narra explícitamente encuentros sensuales y sexuales entre sus personajes.
Sin lugar a dudas esta obra es una de las más antiguas que logró describir entre sus páginas el deseo, el amor y la sensualidad de una manera única y real.

He aquí un fragmento de esta gran obra de la literatura erótica mundial, uno de los libros que logró retratar explícitamente la sexualidad de la china clásica. Uno de los libros, que sin lugar a dudas, integran el top de las novelas más eróticas de los últimos tiempos:
Ximen Qing había comenzado desde joven a frecuentar callejas y callejones de los barrios de placer, y mantenía a algunas de las mujeres que allí vivían. En la base de su miembro llevaba un anillo de plata, fundido con hierbas medicinales. (...)
Poco después la mujer se deshizo de sus vestidos; Ximen Qing la acarició con su mirada y observó que en su pubis no había un solo pelo; era claro y fragante, terso e hinchado, suave y prometedor; rojo y arrugado, pero tenso y firme. Amado por mil, anhelado por diez mil. (...)

Vean sino este gran fragmento en donde los dos personajes se encuentran, observen cómo describe el autor la sensualidad y sexualidad de estos dos cuerpos que se encuentran:
Ximen Qing no podía contener su admiración. La tomó en su regazo, levantó su falda y vio aquel par de piececillos cubiertos por unos zapatitos de satén negro ala de cuervo, justo de medio palmo. Su corazón estaba henchido de gozo. Charlaron pasándose uno al otro las copas de vino. La mujer preguntó a Ximen Qing su fecha de nacimiento, a lo que él respondió:
-Soy tigre, tengo veintisiete años. Nací el 28 del séptimo mes, a medianoche.
La mujer preguntó de nuevo:
-¿Cuántas esposas tienes en casa?
-A parte de mi humilde esposa -respondió Ximen Qing-, tengo tres o cuatro compañeras, pero ninguna me satisface.
-¿Y cuántos hijos?
-Solo tengo una hija que tarde o temprano se casará. No tengo más hijos.
Después de cruzar una serie de preguntas intencionadas, Ximen Qing sacó de su manga una cajita cilíndrica de plata por fuera y de oro por dentro, con pastillas de té perfumadas, que le ofreció con la punta de la lengua. Se abrazaron y sus lenguas se deslizaron como serpientes en medio de un sonido perceptible de succión.