La policía del sur respondía directamente a la Sociedad Rural de Santa Cruz, muchas veces en contradicción con los mandatos del gobernador territorial. La filial de la liga patriótica estaba en su mayor parte compuesta por latifundistas extranjeros que apenas pronunciaban algunas palabras en castellano. Los peones se encontraban en una situación patética de trabajo, no tenían ningún tipo de comunicación con el exterior, no recibían correspondencia y tampoco podían visitar el pueblo. No tenían ningún tipo de acceso a diarios y revistas y estaban condenados a un trabajo continuo, casi sin descanso.
En 1920 y en medio de las condiciones antes señaladas, se preparó una huelga en Río gallegos, (casi como una hazaña) donde reclamaban por los derechos básicos de los obreros de estancias. La patronal se negó a tales peticiones, haciendo actuar a la liga patriótica y encarcelando a los dirigentes obreros, pero la huelga seguía en pie, provocando gran pérdida en los latifundistas ya que era tiempo de esquila y casi no contaban con trabajadores
Marcadores