"La lluvia amarilla" Julio Llamazares
Esta novela corta de Julio Llamazares no es una historia sencilla de leer. Para empezar se trata de un relato escrito en primera persona por el protagonista en el que no hay lugar para los diálogos. Su prosa poética puede resultar algo farragosa en un primer momento y su introducción, en segunda persona, alerta al lector sobre una narración compleja. Sin embargo, es precisamente esa introducción la que despierta una curiosidad que te acompaña a lo largo de casi todo el libro.
El último habitante del pequeño pueblo oscense de Ainielle es el protagonista de una obra triste, depresora, pero con ánimo catártico y purificador. La historia parte de la llegada de unos temerosos caminantes al pueblo de Ainielle en busca de su protagonista. Es tras esa llegada cuando se inicia el relato en el que su protagonista nos narra el proceso de putrefacción física de un pueblo que provoca su crisis psíquica. Una novela sobre la muerte, la familia, el deber, la obstinación y el sacrificio.