"Las amistades peligrosas" Choderlos de Laclos

Pierre- Ambroise- François Choderlos de Laclos es el autor de una de las novelas francesas que con más fuerza ha llegado a nuestros días. Se trata de “Las amistades peligrosas”, y muchos de vosotros, seguro que la conocéis por las adaptaciones cinematográficas que, con mayor o menor éxito, se han hecho en los últimos años. La novela se publicó en 1782. El éxito de la novela fue rotundo como demuestra una frase que un amigo le dedica a Laclos en una carta:

“Todo París se precipita a leerle, todo París habla de usted. Si es felicidad el ocupar a los habitantes de esta inmensa capital, goce usted de ese placer”.

Uno de los elementos que llama la atención a la hora de precipitarse a leer la obra es la “advertencia del editor” en el que se previene al lector de la dudosa veracidad de los hechos que a continuación se describen. Esta advertencia, por supuesto, elevó exponencialmente el interés de los franceses por la obra. ¿La habéis leído? ¿Qué opináis?

Tengo que decir que yo leí esta obra después de ver dos de esas adaptaciones cinematográficas a las que te refieres. Por lo tanto, ya estaba sobre aviso de lo que me esperaba. Una de las cosas que puede sorprender al lector, e imagino que en muchos casos, no demasiado gratamente, es el hecho de que es una novela epistolar. Es decir, está estructurada a través de las cartas que se envían sus protagonistas. Este hecho puede ralentizar su lectura al ser un género no demasiado habitual en la literatura en nuestros días. Sin embargo, conviene reflexionar sobre la forma de comunicación durante aquellos tiempos. La carta era el vehículo que utilizaban las personas para contarse sus intimidades y esta es una de las razones de la gran acogida que tuvo la novela en su tiempo. Los aristócratas tenían ingentes cantidades de misivas a buen recaudo y en ellas, hablaban, probablemente, en similares términos de lo que lo hacen los protagonistas de esta novela.

Pero bueno ¿Te gusta? ¿O no? :) Es cierto, lo que dices. Su estructura puede sorprender en un principio. Una vez que te pones a leer, es posible, que en las primeras páginas no te sientas muy a gusto, pero conviene darle una oportunidad. De lo que no hay duda es que tras esas misivas se cuenta una historia plena de sugerencias y enormemente elocuente sobre el comportamiento de las clases más elevadas de la aristocracia francesa del XVIII. Su personaje principal, o al menos, quien lleva parte del peso de la obra es la marquesa de Merteuil. Una mujer de gran experiencia en las vicisitudes del amor que intercambia confidencias con el Vizconde de Valmont. El carácter mezquino de ambos aflorará a lo largo de las cartas. Merteuil y Valmont se jactan de conocer todos los entresijos del amor, o más bien, del cortejo y también de utilizar para su beneficio personal todas estas habilidades.

Sí, sí, claro que me gusta. La leí hace unos años ya, pero como dije vi primero dos películas basadas en la obra de Laclos. Por un lado la peli de Stephen Frears y, también, la de Milos Forman. Es curioso que los dos proyectos se gestaron en paralelo. Es habitual en Hollywood que surjan conflictos de este tipo. Sucede cuando dos grandes productoras se pelean por los derechos de una obra, y al final, ambas deciden competir y llevarla a cabo. Con “Las amistades peligrosas” el conflicto fue en beneficio de los espectadores ya que ambas películas tienen bastante interés. La de Frears, pone mayor énfasis en la tragedia subyacente a la historia, y la de Forman ironiza sobre la misma tratando de ofrecer una visión más ácida de las relaciones entre el hombre y la mujer de aquellos tiempos. Tal vez, el proyecto de Frears tuvo mayor reconocimiento, pero ambas pelis son buenas.

Yo me quedo también con la película de Frears. Este director es también conocido por llevar otra novela a la gran pantalla: “Alta fidelidad”. Aunque debo decir que no es para nada de mi agrado dicha película. Sin embargo, “Las amistades peligrosas” es un film notable en donde destacan sobre todo las actuaciones de Glenn Close y de John Malkovich. El guión de este trabajo incide especialmente en la falta de escrúpulos del personaje de Merteuil que maneja a su antojo a todos los personajes de su alrededor. Por otro lado Malkovich, es decir Valmont, actúa de un modo algo contradictorio, especialmente en la fase final de la historia, atrapado por unos sentimientos que se creía incapaz de volver a “padecer”. Su final es maravilloso. Me refiero a la escena del teatro en el que Glenn Close se enfrenta a un difícil trago.

La de Frears es buena, sin duda, pero conviene aclarar para aquellas personas que no hayan leído la novela original, que los guionistas de la película se permiten ciertas licencias con respecto a la obra de Laclos. El comportamiento final de Valmont, no se corresponde del todo con el original. Tampoco es momento de desvelar más de la cuenta, pero considero que la película busca un final efectista y trágico. Y lo logra admirablemente. Pero el Valmont de Daclos es un personaje con más dobleces que el que se muestra en la película. Y sus postreros actos obedecen a una dudosa procedencia. Más venganza que amor en Laclos. Más amor que venganza en Frears. Esperemos no habernos pasado con el “spoiler”.

Quizás te pasas algo sí. Pero hay que tener en cuenta que no es lo mismo el público del siglo XVIII que el de la actualidad, y la película busca transmitir la misma historia, pero concediéndose ciertas licencias efectistas. Por cierto, ¿qué te parece la de Forman? A mí me gustó menos, aunque hay que valorar el trabajo de sus actores principales. Especialmente el de él hoy tan de moda y oscarizado Colin Firth.

Pues a mí me gusta más “Valmont” de Forman. Considero que atrapa mejor la esencia de la obra de Laclos al tirar más de ironía. Las relaciones de los personajes son menos dramáticas y esto provoca que la película tenga un resultado más cercano a la novela original. Y es que Laclos pretendía con su obra realizar una crítica brutal a la sociedad de su época, a la doble moral de sus aristócratas. Pero también ideó su obra como un divertimento para el lector, como si la novela fuese un ojo de buey en el que poder fisgar como un buen vouyeur, las intimidades de varios miembros de la nobleza. Hay que tener en cuenta que también las capas más bajas de la sociedad pudieron acceder a la novela, que a buen seguro, hizo las delicias de todos aquellos que más o menos veladamente odiaban a “los dueños” de Francia. Recordemos que esta novela se publicó años antes del estallido de la revolución francesa.

No había caído en eso. Es verdad que la revolución comenzó en 1789. Seguro que muchos revolucionarios tenían como libro de cabecera esta obra. Bueno, y los que sufrieron la revolución también :D Pero bueno, creo que los dos estamos de acuerdo en que “Las amistades peligrosas" es un gran libro que supone un verdadero tratado sobre las relaciones amorosas de una época. Y si se sustituyen las cartas por mails o sms, seguro que muchos de sus lectores actuales verán actitudes similares en las personas de hoy en día. Muchas conocemos Merteuils y Valmonts. Sobre todo, Valmonts… :o

Yo no he leído el libro, pero por lo que comentáis no sé si me pondré a ello, la verdad... ;) Eso de que se trate de una novela escrita a través de cartas no me convence del todo. Pero sí que conozco la historia gracias a una de las dos películas que habéis citado, la de Stephen Frears. Me gustó bastante, sobre todo el papel de John Malcovich. Aunque comentáis que su personaje no es del todo igual en la obra. Hay varias escenas impactantes en la peli, especialmente aquella en la que Valmont le repite una y otra vez al personaje de Michelle Pfeiffer: "No lo puedo evitar". Luego Valmont sale de la estancia angustiado por no haber hecho caso a su corazón. Al menos así lo vi yo. Es una historia muy interesante, y aunque no creo que lea la novela, quiero manifestar mi homenaje a Pierre Ambroise François Choderlos de Laclos por su obra. Por otro lado, con semejante nombre, era imposible no escribir bien... :D