Frases de Mario Benedetti

Mario Benedetti fue un poeta nacido en Uruguay, en 1920. Dejó un importante legado de obras que aun perduran en la memoria de sus lectores, puesto que contaba con un estilo muy particular de escribir, en donde no existían palabras rebuscadas ni superfluas. En la poesía, el desencuentro, el amor y la amistad fueron los temas sobre los que el escritor más dijo.

Además de poeta fue autor de numerosos ensayos literarios y escribió para medios gráficos de Latinoamérica y el mundo.

Aquí comparto algunas de sus frases:
“Hay pocas cosas tan ensordecedoras como el silencio”.
“Cada suicida sabe dónde le aprieta la incertidumbre”.
“No hay alegría más alegre que el prólogo de la alegría”.
“No sé tu nombre, sólo sé la mirada con que me lo dices”.
“Cómo disfrutan en un bando y en otro los asesinos”.

Otro de los temas recurrentes en sus poesías era el del silencio y la soledad, a los que supo plasmar en bellos versos. En el sitio You Tube se pueden encontrar videos de este escritor recitando sus magníficos poemas.

El sensible escritor uruguayo Mario Benedetti, cuyo nombre real era Mario Orlando Hardy Hamlet Brenno Benedetti Farrugia, fue uno de los poetas más relevantes de habla hispana del siglo XX que escribía sobre muchos temas y también hablaba sobre una gran variedad de cuestiones, sobre todo, de aquellas relacionadas con el amor y la soledad.

“Yo no sé si Dios existe, pero si existe, sé que no le va a molestar mi duda”.

“Cinco minutos bastan para soñar toda una vida, así de relativo es el tiempo”.

“Desde que los hijos educan a sus padres, se acabaron los complejos de Edipo”.

Tuvo una producción nutrida, entre las que se llegan a contar más de 80 títulos, los que fueron traducidos a muchos idiomas. Mario Benedetti dijo sobre el amor, el corazón y las mujeres:

“Qué buen insomnio si me desvelo sobre tu cuerpo”.

“Si el corazón se aburre de querer para qué sirve”.

Mario Benedetti, escritor y poeta uruguayo, nacido en el año 1920 y fallecido en el año 2009 nos ha dejado a nosotros, sus lectores, unas perlas literatias y poéticas que valen la pena recordar. Durante mucho tiempo yo he renegado de Benedetti, de su poesía y que se haya puesto tan de moda. De hecho me parecía una literatura muy simplista hasta que encontré algunos poemas en los que se escapa del amor y hablaba de otros temas, entre esos temas más interesantes se encuentran la política, la pobreza y la economía…
“Yo amo, tú amas, él ama, nosotros amamos, vosotros amaís, ellos aman. Ojalá no fuese conjugación sino realidad.”

“El amor no es repetición. Cada acto de amor es un ciclo en si mismo, una órbita cerrada en su propio ritual.”

“El cuento no admite fallas, se construye palabra por palabra, cada una tiene que tener su rol, y los finales son muy importantes.”

Cuando el autor sale de su tópico y típico poema del amor nos encontramos con una poesía capaz de ser tan militante como un poema de amor. En la confrontación de la poesía de amor con una poesía más política nos encontramos con un nuevo autor capaz de revelarnos una utopía política y un descubrimiento sobre la problemática mundial de la política y de la pobreza. Y logra contarlo de la manera más poética. No es tarea fácil, pocos poetas pueden lograr lo que Benedetti logró.

“No me parece un punto esencial que la literatura tenga un compromiso político. Lo esencial es que sea buena literatura. El compromiso tiene su fuerza si parte de una actitud sincera del autor. Es lo mismo que el amor. Si el poeta está enamorado, aparece su experiencia. Es muy difícil escribir poesía sin estar enamorado, y con la política pasa igual.”

“La utopía es una cosa que debemos mantener.”

Algunas de sus frases más interesantes, también, es cuando habla sobre el género que más le gusta y en el que se siente más cómodo: la poesía.

“Ser de izquierda es tener como punto de mira el bienestar de la gente, la igualdad social, la solidaridad. Por eso me preocupa mucho este momento, porque la humanidad está muy indefensa.”

“Creo que si no hay un gran cambio, la humanidad va a desaparecer. Todos vamos a morir, tenemos que acostumbrarnos a esa idea, pero no me gustaría que muriese la humanidad.”

“El género que más me importa es la poesía. Soy un poeta que además escribe cuentos y novelas. Mis poemas son bastantes sencillos, bastante claros, y eso es algo que se convirtió en una obsesión para mí: la sencillez.”

“A pesar de los años que se tengan, el espíritu de un cuento o de un poema puede seguir siendo joven. Un poema que tiene alegría, que tiene una cosa vital, rejuvenece.”

“Cuando me entierren, por favor, no se olviden de mi bolígrafo.”

La poesía de Mario Benedetti es una de las más leídas en el continente Latinoamericano. Pero el uruguayo trascendió también los límites del cono sur y es apreciado en España.

Fue un intelectual comprometido con su tiempo. Algunas sus frases fueron:

“Me jode confesarlo pero la vida es también un bandoneón. Hay quien sostiene que lo toca dios, pero yo estoy seguro que es Troilo, ya que dios apenas toca el arpa y mal”.

“Fuere quien fuere lo cierto es que nos estira en un solo ademán purísimo y luego nos reduce de a poco a casi nada y claro nos arranca confesiones quejas que son clamores y
vértebras de alegría”.

“Esperanzas que vuelven como los hijos pródigos y sobre todo como los estribillos”.

Escribió sobre el amor, la amistad, el silencio y sobre las mujeres. No fue un narrador sino que fue un poeta vigente con su tiempo. También fue auto de ensayos críticos y artículos periodísticos.

No me canso nunca de leer y leer la poesía de Mario Benedetti, sobre todo porque supo plasmar en versos el sentir despueblo, las problemáticas sociales y el desengaño, el amor y el desamor, con un lenguaje sencillo, despojado de artilugios y complicaciones.

Algunas de sus frases y versos fueron:

“Los abruptos pueden ser violentos tozudos y hasta sectarios pero los exabruptos son siempre resentidos”.

“¿Qué les queda por probar a los jóvenes en este mundo de rutina y ruina?, ¿cocaína?, ¿cerveza?, ¿barras bravas? Les queda respirar, abrir los ojos, descubrir las raíces del horror, inventar paz así sea a ponchazos, entenderse con la naturaleza y con la lluvia y los relámpagos y con el sentimiento y con la muerte esa loca de atar y desatar”.

“También les queda discutir con dios tanto si existe como si no existe, tender manos que ayudan, abrir puertas entre el corazón propio y el ajeno, sobre todo les queda hacer futuro a pesar de los ruines de pasado y los sabios granujas del presente”.

El gran escritor uruguayo Mario Benedetti nació un 14 de septiembre pero de 1920 en Paso de los Toros, una localidad del centro de Uruguay. Y aunque su primer libro lo publicó en 1950, muchos dicen que había nacido con la vena literaria porque ya en la escuela primaria, en Montevideo, desde muy chico, escribía poemas y cuentos.

Quisiera compartir con ustedes algunos de sus poemas y pensamientos:

“No sé si alguna vez les ha pasado a ustedes
pero el Jardín Botánico es un parque dormido
en el que uno puede sentirse árbol o prójimo
siempre y cuando se cumpla un requisito previo.
Que la ciudad exista tranquilamente lejos”.

“El secreto es apoyarse digamos en un tronco
y oír a través del aire que admite ruidos muertos
cómo en Millán y Reyes galopan los tranvías”.

“No sé si alguna vez les ha pasado a ustedes
pero el Jardín Botánico siempre ha tenido
una agradable propensión a los sueños”.

Mario Benedetti tuvo una infancia bastante dura y no pudo terminar el secundario siendo adolescente porque tenia que trabajar y lo terminó, si, pero ya siendo adulto y como alumno libre. Siendo muy joven a los 18 años, vino a vivir a buenos aires hasta 1948 que vuelve a Montevideo y empieza a publicar sus libros. Que su primer libro, en 1949, fue un libro de cuentos, después vendría su primer libro de poemas, en 1950 y en 1953 su primera y única novela. Su tema recurrente era el silencio, aunque también la soledad y la amistad.

Algunos de sus versos fueron:

No sé si alguna vez les ha pasado a ustedes
ah pero las parejas que huyen al Botánico
ya desciendan de un taxi o bajen de una nube
hablan por lo común de temas importantes
y se miran fanáticamente a los ojos
como si el amor fuera un brevísimo túnel
y ellos se contemplaran por dentro de ese amor.

Mario Beneddetti Ocupó tres veces la dirección de la revista literaria marcha que era la publicación más influyente, si se quiere, de la vida política y cultural de Uruguay y una de las más importantes de América latina, de la misma manera que lo fue la revista sur, en argentina aunque data de un tiempo anterior que la revista marcha y era netamente literaria, pero la revista sur también fue una publicación muy importante.

He aquí otros de sus versos extraídos del poema A tientas:

“Se retrocede con seguridad
pero se avanza a tientas
uno adelanta manos como un ciego
ciego imprudente por añadidura
pero lo absurdo es que no es ciego
y distingue el relámpago la lluvia
los rostros insepultos la ceniza
la sonrisa del necio las afrentas
un barrunto de pena en el espejo
la baranda oxidada con sus pájaros
la opaca incertidumbre de los otros
enfrentada a la propia incertidumbre”.

Dicen que con su libro poemas de la oficina que publicó en 1956, influenció a muchos poetas de su generación, sobre todo por el tono de diálogo, el tono de conversación que tenían sus versos. La revolución cubana influenció a Benedetti y a partir de ese hecho su narrativa y poesía cambiaron, y según él mismo dijo, la crisis de cuba le hizo mirar a América latina con otros ojos, con los ojos del sur. Seguramente todos recordarán el tema el sur también existe, interpretado por Juan Manuel serrat, por supuesto, con autoría de Mario benedetti.

Algunos de los versos de poemas de la oficina son:

“Ellos saben si soy o si no soy,
ellos cierran la mano y dicen: «Pero»
viven y relativamente son milagros
y sueldo y providencia y mal aliento
y gastan por docenas los pañuelos sin lágrimas.

Ellos saben si soy o si no soy,
ellos miran al cielo y dicen «¿Cuánto?»,
pasan y relativamente son nombrados,
pero yo, como ellos me instruyeron,
no digo ni caramba ni ahí te pudras”.

Mario Benedetti, este gran escritor uruguayo, ha sido muy prolífico en su carrera ya que cultivó todos los géneros: la novela, el ensayo, el cuento y la poesía. Había nacido en Paso de Los Toros, una localidad de Uruguay, en América del sur. Allí vivió en su infancia y luego se mudó a la ciudad de Tacuarembó.

Algunas de sus frases poéticas fueron:

“Se me ocurre que vas a llegar distinta, no exactamente más linda ni más fuerte ni más dócil ni más cauta, tan solo que vas a llegar distinta como si esta temporada de no verme te hubiera sorprendido a vos también”.

“Quizá porque sabes cómo te pienso y te enumero después de todo la nostalgia existe
aunque no lloremos en los andenes fantasmales ni sobre las almohadas de candor ni bajo el cielo opaco”.

“Tu rostro es la vanguardia tal vez llega primero porque lo pinto en las paredes
con trazos invisibles y seguros”.

Si bien no se estilaba comenzar los estudios desde muy pequeños, en la época en que Mario Benedetti vivió, fue a la escuela a los 4 años. Aunque después no terminaría los estudios secundarios y los finalizaría como alumno libre, ya siendo adulto. Desde 1938 y por tres o cuatro años, Mario Benedetti viajó desde Uruguay a Argentina varias veces, ya que colaboraba en distintas revistas y redacciones de ese país hermano de América del sur.

Otras de sus frases y poemas fueron:

“No olvides que tu rostro me mira como pueblo sonríe y rabia y canta como pueblo
y eso te da una lumbre inapagable”.

“Ahora no tengo dudas, vas a llegar distinta y con señales con nuevas con hondura
con franqueza”.

“Sé que voy a quererte sin preguntas, sé que vas a quererme sin respuestas”.

“No sé si alguna vez les ha pasado a ustedes pero el Jardín Botánico es un parque dormido en el que uno puede sentirse árbol o prójimo, siempre y cuando se cumpla un requisito previo”.

Su primer cargo de director de revista fue en el año 1943, cuando tuvo a su caro la revista Marginalia. Fue en ese mismo año en el que publica sus libros de ensayos Peripecia y novela. Dos años después formó parte de la redacción del semanario Marcha, famoso en Latinoamérica en materia literaria.

Algunos de sus versos y frases fueron:

“El secreto es apoyarse digamos en un tronco, y oír a través del aire que admite ruidos muertos cómo en Millán y Reyes galopan los tranvías”.

“No sé si alguna vez les ha pasado a ustedes pero el Jardín Botánico siempre ha tenido
una agradable propensión a los sueños a que los insectos suban por las piernas
y la melancolía baje por los brazos hasta que uno cierra los puños y la atrapa”.

“Después de todo el secreto es mirar hacia arriba y ver cómo las nubes se disputan las copas y ver cómo los nidos se disputan los pájaros”.

LA revista Marcha continuó publicándose hasta os primeros años de la déccada del 70, en el siglo XX, hasta que fue prohibida por el gobierno dictatorial de Uruguay en 1974. Mientras estaba dirigiendo el semanario Marcha, conoció a quien sería su compañera de toda la vida, con quien se casa en el año 1954.

Quiero compartir más frases y poemas de este gran escritor uruguayo:

“No sé si alguna vez les ha pasado a ustedes
ah pero las parejas que huyen al Botánico
ya desciendan de un taxi o bajen de una nube
hablan por lo común de temas importantes
y se miran fanáticamente a los ojos
como si el amor fuera un brevísimo túnel
y ellos se contemplaran por dentro de ese amor”.

“Aquellos dos por ejemplo a la izquierda del roble
(también podría llamarlo almendro o araucaria
gracias a mis lagunas sobre Pan y Linneo)
hablan y por lo visto las palabras
se quedan conmovidas a mirarlos
ya que a mí no me llegan ni siquiera los ecos”.

A comienzos del año 1950 Mario Benedetti forma parte de la dirección de la redacción de la revista Número, la cual tuvo gran prestigio en la época. Se proclama opositor al gobierno de Estados Unidos y es en ese año en el que obtiene, por varios años consecutivos, el Premio del Ministerio de Instrucción Pública.

Otras de las hermosas frases de Mario Benedetti que quisiera mostrarles a ustedes, fueron:

“No sé si alguna vez les ha pasado a ustedes pero es lindísimo imaginar qué dicen
sobre todo si él muerde una ramita y ella deja un zapato sobre el césped, sobre todo si él tiene los huesos tristes y ella quiere sonreír pero no puede”.

“Cada vez que te arrancaban del mundo no había calabozo que te viniera bien
asomabas el alma por entre los barrotes y no bien los barrotes se aflojaban turbados
aprovechabas para librar el cuerpo”.

Entre los trabajos que tuvo Mario Benedetti, se destaca a mediados de la década del 60 el de periodista y crítico de teatro. Trabajó también en las publicaciones «Al pie de las letras», Peloduro y La tribuna popular. En esa época mario Benedetti ya era un escritor reconocido mundialmente y fue convocado por Casa de las Américas para ser jurado de uno de sus famosos concursos. También participó en México del Segundo Congreso Latinoamericano de Escritores.

Otras de sus frases fueron:

“Usabas la metáfora ganzúa para abrir los cerrojos y los odios con la urgencia inconsolable de quien quiere regresar al asombro de los libres, le tenías ojeriza a lo prohibido a las desgarraduras para ínfula y orquesta, al dedo admonitorio de algún colega exento algún apócrito buen samaritano que desde europa te quería enseñar”.

“Le tenías ojeriza a la pureza porque sabías cómo somos de impuros cómo mezclamos sueños y vigilia cómo nos pesan la razón y el riesgo”.

Mario Bendetti fundó, en el año 1968, el Centro de Investigaciones literarias de Casa de las Américas. Tres años más tarde participa en política y funda un partido llamado Movimiento de Independientes 26 de marzo, que representaba a las ideologías de izquierda.
En 1971 aparece uno de sus libros llamado "Crónica del 71", el que reunía muchos artículos sobre política que había publicado en diversos diarios y revistas. Tamién aparece el libro llamado Los poemas comunicantes, que reunía entrevistas que le realizó a los poetas latinoamericanos y españoles.

Otras de sus frases fueron:

“Por suerte eras impuro evadido de cárceles y cepos no de responsabilidades y otros goces impuro como un poeta que eso eras además de tantas otras cosas”.

“Ahora recorro tramo a tramo nuestros muchos acuerdos y también nuestros pocos desacuerdos y siento que nos quedan diálogos inconclusos, recíprocas preguntas nunca dichas malentendidos y bienentendidos que no podremos barajar de nuevo”.

Cuando los militares toman el gobierno uruguayo mediante un golpe, en 1973, Mario Benedetto se exilia y elige Buenos Aires, pero luego debe volver a marcharse, esta vez hacia Perú ya que en el año 1976 Argentina sufre también un golpe militar. Despues viaja a España en donde viviría por varios años. Fue un tiempo en que Mario Benedetti sufrió mucho, ya que su esposa había quedado en Uruguay cuidando de los padres de los dos.

Otras frases de Mario Benedetti Fueron:

“Pero todo vuelve a adquirir su sentido si recuerdo tus ojos de muchacho
que eran casi un abrazo casi un dogma el hecho es que llegaste temprano al buen humor
al amor cantando”.

“Llegaste al amor decantado, al ron fraterno, a las revoluciones, pero sobre todo llegaste temprano, demasiado temprano a una muerte que no era la tuya y que a esta altura no sabrá que hacer con tanta vida”.

Después de vivir varios años en Madrid, regresa a América peo se exilia en Cuba y luego vuelve a España pero esta vez elige Palmas de Mallorca. En el año 1983, después de un largo exilio, Mario Benedetti vuelve a Uruguay en donde comienza un nuevo camino como escritor, publicando muchas obras inspiradas en el sufrimiento de su exilio.

El cantautor Juan Manuel Serrat graba en su honor, en 1983, un disco llamado El sur también existe, que lleva poemas de Mario Benedetti. Algunas estrofas de los poemas de El sur también existe dice:

“Con su ritual de acero
sus grandes chimeneas
sus sabios clandestinos
su canto de sirenas
sus cielos de neón
sus ventas navideñas
su culto de dios padre
y de las charreteras
con sus llaves del reino
el norte es el que ordena

pero aquí abajo abajo
el hambre disponible
recurre al fruto amargo
de lo que otros deciden
mientras el tiempo pasa
y pasan los desfiles
y se hacen otras cosas
que el norte no prohibe
con su esperanza dura
el sur también existe”.

El disco El sur también existe, grabado por Joan Manuel Serrat en el año 1983 tuvo un éxito imparable, sobre todo porque salió en medio de la recomposición de las democracias en América del Sur, lo que propició que muchos se hicieran fanáticos del cantante español y también del autor uruguayo. Mario Benedetti tambiéns e proclamó en contra de la ley de suplís que quería dejar sin condena a los represores de Estado.

Comparto más versos del poema El sur también existe:

“Con sus predicadores
sus gases que envenenan
su escuela de chicago
sus dueños de la tierra
con sus trapos de lujo
y su pobre osamenta
sus defensas gastadas
sus gastos de defensa
con sus gesta invasora
el norte es el que ordena

pero aquí abajo abajo
cada uno en su escondite
hay hombres y mujeres
que saben a qué asirse
aprovechando el sol
y también los eclipses
apartando lo inútil
y usando lo que sirve
con su fe veterana
el Sur también existe”.

los poemas de Mario Benedetti giraron, sobre todo, en el amor, la amistad, el silencio y el exilio. Fue un condenado político que debió sufrir años de alejamiento de su patria y de sus seres amados, lo que lo marcó para siempre y marcó también su producción literaria.

Otros de los versos de El Sur también existe dicen:

“Con su corno francés
y su academia sueca
su salsa americana
y sus llaves inglesas
con todos su misiles
y sus enciclopedias
su guerra de galaxias
y su saña opulenta
con todos sus laureles
el norte es el que ordena

pero aquí abajo abajo
cerca de las raíces
es donde la memoria
ningún recuerdo omite
y hay quienes se desmueren
y hay quienes se desviven
y así entre todos logran
lo que era un imposible
que todo el mundo sepa
que el Sur también existe”.

Mario Benedetti también tuvo un papel en el cine. Fue en una película argentina que contó con una co producción con Canadá y que se llamó "El Lado Oscuro del Corazón" y que estuvo protagonizada por el actor argentino Mario Grandinetti quien jugaba a ser una suerte del famoso poeta Oliverio Girondo en los tiempos actuales y gran aprte del guión de la película estaba basado en fragmentos de la novela de Girondo “Espantapájaros”. En la película, Mario Benedetti aparece recitando uno de sus versos.

Otras de sus frases fueron:

“Se retrocede con seguridad, pero se avanza a tientas. Uno adelanta manos como un ciego, ciego imprudente por añadidura pero lo absurdo es que no es ciego y distingue el relámpago la lluvia”.

“Los rostros insepultos la ceniza, la sonrisa del necio las afrentas, un barrunto de pena en el espejo, la baranda oxidada con sus pájaros, la opaca incertidumbre de los otros enfrentada a la propia incertidumbre se avanza a tientas, lentamente”.

De regreso en su país, en 1983, Mario Benedetti se hizo acreedor de merecidos, sucesivos y prestigiosos premios. En el año 1997 recibió el título de Doctor Honoris Causa por la Universidad de Alicante, recibió el Premio león de Felipe por su compromiso político como escritor. También obtuvo el doctorado honoris causa en Ciencias Filológicas de la Universidad de La Habana. Otra mención aparte merceen los galardones que le han dado como el VIII Premio Reina Sofía de poesía iberoamericana, EL José Martí y el Etnosur.

Aquí hay más de los bellos versos de Mario Benedetti:

“Por lo común a contramano
de los convictos y confesos
en búsqueda tal vez
de amores residuales
que sirvan de consuelo y recompensa
o iluminen un pozo de nostalgias
se avanza a tientas / vacilante
no importan la distancia ni el horario
ni que el futuro sea una vislumbre
o una pasión deshabitada
a tientas hasta que una noche
se queda uno sin cómplices ni tacto
y a ciegas otra vez y para siempre
se introduce en un túnel o destino
que no se sabe dónde acaba”.

La vida del escritor uruguayo Mario Benedetti tuvo una gran repercusión en el mundo, ya que se filmó un documental que daba cuenta e su vida y se estrenó en Roma en el año 2004. se llamó "Mario Benedetti y otras sorpresas". El guión del trabajo filmográfico fue de Alessandra Mosca, quien también lo dirigió. Un año después Bendetti pubicó el libro Adioses y bienvenidas. En la presentación del libro también se presentó el documental Palabras verdaderas, donde el poeta hizo aparición.

Mario Bendetti siempre fue un poeta comprometido en lo político y fue distinguido por ello en varias ocasiones. Un poema que lude a su compromiso cívico dice así:

“Cuando el presidente, cualquier presidente
se preocupa tanto
por los derechos humanos

parece evidente que en ese caso
derecho no significa facultad
o atributo
o libre albedrío
sino diestro
o antizurdo
o flanco opuesto al corazón
lado derecho en fin

en consecuencia
¿no sería hora
de que iniciáramos
una amplia campaña internacional
por los izquierdos humanos?”.

En sus últimos años Bendetti vivió en Montevideo, luego de que su esposa muriera causa de una larga enfermedad. Como había vivido en Madrid y en otros lugares del mundo, cuando se mudó definitivamente a Uruguay dono parte de sus libros al Centro de Estudios Iberoamericanos Mario Bendetti de la Universidad de Alicante.

Cuando murió su esposa, quien había sido su compañera por 60 años, Mario Bendetti sobrellevó ese duro momento escribiendo y publicó el libro Canciones del que no canta, en el que hace mención de su vida personal, junto a su mujer. Algunos de los versos de ese libro dicen:

“Alguien limpia la celda
de la tortura
que no quede la sangre
ni la amargura

alguien pone en los muros
el nombre de ella
ya no cabe en la noche
ninguna estrella

alguien limpia su rabia
con un consejo
y la deja brillante
como un espejo”.

Mario Bendetti murio el 17 de mayo del año 2009 en Montevideo. Tenía 88 años. Ese día, el cuerpo del poeta fue velado en el salón del Senado de la Nación de Uruguay y el ejecutivo de su país decretó duelo nacional.

Otras de sus frases fueron:

“Alguien piensa hasta cuando alguien camina. Suenan lejos las risas, una bocina
y un gallo que propone su canto en hora mientras sube la angustia, la voladora”.

“Alguien piensa en afuera que allá no hay plazo, piensa en niños de vida y en un abrazo”.

“Alguien quiso ser justo pero no tuvo suerte. Es difícil la lucha contra la muerte”.

“Alguien limpia la celda de la tortura, lava la sangre pero no la amargura”.

“Para matar al hombre de la paz, para golpear su frente limpia de pesadillas
tuvieron que convertirse en pesadilla, para vencer al hombre de la paz
tuvieron que congregar todos los odios y además los aviones y los tanques”.

Mario Benedetti era un poeta por naturaleza, incluso, siempre sostuvo que lo más importante en su vida era la poesía auqneu también haya sido un brillante escritor de novelas y cuentos. Algunas de sus frases son:

“El género que más me importa es la poesía”.

“La mayor parte de mis libros son de poemas. Cuando viví en Buenos Aires, en esa primera época, fue muy importante encontrarme con la poesía de Baldomero Fernández Moreno”.

“Yo sabía que iba a ser poeta desde niño, pero la poesía que se escribía en ese entonces, tanto en el Uruguay como en la Argentina, era muy hermética”.

“Sin perjuicio de que la disfrutara, tenía claro que yo no iba a escribir así. Cuando descubrí a Fernández Moreno, encontré un buen poeta que escribía claro y sencillo”.

“Debí pagarme la edición de mis primeros siete libros. Recién en el octavo, "Montevideanos", conseguí un editor. Ese fue el primero de mis libros que tuvo lectores”.

Su vida como escritor no funcionó hasta muchos años después de publicar la novela La tregua. De hecho, Mario Bendetti continuó trabajando en otros oficios que no era el de escritor ara ganarse la vida. Al respecto dijo:

“Cuando me casé tenía tres empleos. Trabajé quince años en una empresa inmobiliaria, y en el rato que tenía libre para el almuerzo, escribía. En el café "Sorocabana", que ya no existe, escribí íntegramente "La tregua". Allí tuve reconocimiento masivo, y no sólo en el Uruguay. Es un misterio para mí, no sé por qué tuvo tanto éxito. Ni siquiera creo que sea mi mejor novela”.

“"La borra del café". Me parece que es la que quedó más redondita”.

“No me gustaron las modificaciones que le hicieron al guión de La tregua. Le quitaron todas las connotaciones políticas que tenía, que no eran demasiadas, pero se las quitaron. Lo que tenía de bueno era la actuación del elenco: Héctor Alterio, Ana María Picchio, Norma Aleandro, Cipe Lincovsky, Lautaro Murúa. La adaptación de "Gracias por el fuego" tampoco me gustó. El final me pareció horrible. Pero ahí no tuvo la culpa Sergio Renán sino los productores, que cambiaron el final para que tuviera más taquilla”.

A diferencia de otros escritores, Mario Benedetti decía que la literatua no siempre debía tener connotaciones políticas. Sobre ello dijo:
“Lo esencial es que sea buena literatura”.

“El compromiso tiene su fuerza si parte de una actitud sincera del autor. Si lo que sucede en su entorno le afecta como ciudadano, eso se refleja en lo que escribe. Es lo mismo que el amor”.

“Si el poeta está enamorado, aparece su experiencia. Es muy difícil escribir poesía sin estar enamorado, y con la política pasa igual”.

“La política era importante para mí y eso se reflejó en mis libros. Casi todos los escritores latinoamericanos de esa época tuvieron un compromiso político. Hubo hechos políticos como la Revolución Cubana que marcaron profundamente”.

“Con respecto a la Revolución cubana soy crítico de muchas cosas, como por ejemplo la pena de muerte. Pero a pesar de los defectos, que he señalado muchas veces, creo que fue un hecho muy importante para toda América Latina”.

Si bien Mario Bendetti fue un hombre muy comprometido en lo político, también dice que no siempre la política debe teñir a la literatura y que si a la literatura le falta el contenido político no tiene porqué ser mala. Sobre las respercusiones que tuvo en su vida la Revolución cubana, dijo:

“Me vinculó con otra realidad, con otras posibilidades de cambio, y con dirigentes que aunque se equivocaron muchas veces, querían el bienestar de su pueblo. A veces lo consiguieron, a veces no. Pero aún los Estados Unidos, con todo su poder, no han podido con la Revolución Cubana. Por algo es”.

“Nunca fui Tupamaro, pero respetaba que gente joven, muy sacrificadamente, se jugara la vida por un ideal político. Verdaderamente había unas cuantas cosas por las que luchar. Además los Tupamaros eran bastante humanos en sus acciones, si las comparamos con las acciones de la ETA, por ejemplo. Sus muertes eran resultado de una lucha”.

Sobre su vida como militante político y también como dirigente Mario Benedetti dijo:

“No me arrepiento de haber sido militante, pero sí de haber sido dirigente político. No tengo la menor vocación, y además para un intelectual es muy difícil no poder ser crítico. Creo que puedo hacer más a través de los literario que de la dirigencia política”.

Acerca de la época en que el escritor y poeta uruguayo escribió "El cumpleaños de Juan Angel", el autor contó:

“Ahí aparecen los Tupamaros. Fue una experiencia muy curiosa, porque se trata de una novela en verso. Influenciado por César Vallejo, quien cuando una palabra no estaba en el diccionario la inventaba, inventé más palabras en ese libro que en ningún otro”.

“Yo soy un hombre de clase media, es mi mundo. Algunos críticos me reprocharon que en mis novelas no aparecieran obreros. Intenté hacerlo, pero esos obreros míos eran un desastre, no hablaban como obreros. Entonces decidí dedicarme a la clase media”.

Otros de los pensamientos políticos de MArio Benedetti, sobre todo de Latinoamérica y de su relación siempre en tensión con Estados Unidos, opinó:

“En mis novelas no aparecen millonarios. Yo creo que la difusión que han tenido mis libros se debe a que la clase media es universal. Está en todos los regímenes y en todos los países. Entonces siempre hay algo de lo que yo digo que le toca a la gente”.

“A veces soy un hombre desilusionado de algunas izquierdas, pero sigo siendo de izquierda”.
“Ser de izquierda es tener como punto de mira el bienestar de la gente, la igualdad social, la solidaridad. Por eso me preocupa mucho este momento, porque la humanidad está muy indefensa”.

“Creo que si no hay un gran cambio, la humanidad va a desaparecer. Todos vamos a morir, tenemos que acostumbrarnos a esa idea, pero no me gustaría que muriese la humanidad”.

“Es un mal momento para la democracia norteamericana, y me alegro. Cuantos más malos momentos pase, me alegro más”.

He encontrado una bella entrevista que le hicieron al escritor uruguayo Mario Benedetti en el año 2009, tiempo antes de su muerte. Resulta asombrosa su lucidez y sus pensamientos tan intactos pese al paso inexhorable del tiempo. Comparto la pregunta del periodista y sus respuestas:

¿Qué es para ti la poesía?
MB: La poesía es el género de la sinceridad última, irreversible. No hay veredicto cultural en profundidad sin concurrencia de la poesía.

¿Cómo fueron tus comienzos? ¿Qué ha cambiado desde entonces?
MB: Siempre tuve la seguridad de que sería poeta. Como de niño concurrí al Colegio Alemán de Montevideo, mis primeros poemas los escribí en alemán. Por supuesto, desde entonces ha cambiado todo. Hasta ahora he publicado casi 20 libros de poesía, que documentan la explicable evolución que se ha dado en mis temas y en mis formas.

¿Te gusta más ver publicados tus versos o recitarlos ante público? ¿Qué es lo que más te gusta de los recitales?
MB: Son dos experiencias distintas, pero indudablemente la más importante es la de la escritura. De los recitales, lo que más me gusta es la espontánea reacción de los jóvenes.

Mario Benedetti confeso en varias oportunidades que sus poetas preferidos fueron, entre algunos otros, Rubén Darío, César Vallejo, Antonio Machado, Pablo Neruda, José Martí y Baldomero Fernández Moreno. También tuvo otros poetas preferidos más actuales como Juan Gelman, Roberto Fernándes Retamar, Idea Vilariño, Eliseo Diego, Ernesto Cardenal, Francisco Urondo, Roque Dalton, José Emilio Pacheco.

Sobre la influencia de la mujer en el arte, Bendetti dijo:

“Una ampliación del panorama cultural y la incorporación de otro punto de vista, por cierto muy necesario”.

“Siempre ha habido cierta alergia de los críticos y editores hacia la poesía, y eso influye lógicamente en el lector. También debe tenerse en cuenta que muchos poetas, de ayer y de hoy, suelen usar un lenguaje muy complejo y hasta esotérico, y eso dificulta la comprensión y el disfrute del lector corriente”.

“No es necesario un premio de poesía para demostrar que alguien escribe bien. Suele haber premios que son el producto de mafias literarias, y por supuesto eso no sirve. Pero tampoco es puro negocio, ya que la poesía no es un producto que se venda fácil”.

Otras de las frases de Mario Bendetti sobre poesía, arte, literatura y el papel de los críticos fueron:

“En ese oficio hay de todo, pero un buen crítico (o sea justo, objetivo) puede ser una estimulante influencia en los escritores y en el público”.

“En América Latina, la literatura ha producido, en distintas generaciones, obras de notable calidad, tanto en prosa como en verso. Pienso que, más que con los gobiernos, su aporte tiene que ver con el ciudadano común”.

“Sería muy útil, desde el punto de vista de la enseñanza, que el arte y la poesía que se mostraran a los jóvenes, fuera fácilmente comprensible y además que sus temas resultaran atrayentes”.

“los jóvenes no deben desanimarse ante los primeros o segundos fracasos o al no conseguir editoriales que publiquen sus inéditos. Esos contratiempos suelen representar un filtro para la vocación, cuando ésta es verdadera.

El pensamiento del escritor uruguayo Mario Benedetti se reflejó en sus obras, pero también en sus palabras. Nunca se negó a dar una entrevista a los medios y en ella siempre habló de todo: desde amistad, amor, política y todo aquello que le preguntaran. Algunas de sus frases y pensamientos recopilados de esas entrevistas fueron:

“Debo confesar que sólo conseguí un editor para mi octavo libro; los siete anteriores me los tuve que financiar con mis escasos recursos”.

“Puede ser también que los años le regalen a uno más lucidez, porque las cosas empiezan a verse no sólo con los ojos del presente sino también con los del pasado, y entonces uno puede tener una visión más aproximada del futuro”.

“Cuando uno se hace más viejo, el cuerpo se va deteriorando y la energía cambia, aunque el cuerpo es la meseta donde se apoyan las cosas del espíritu, no?”.

En sus últimos años Mario Bendetti habló sobre la vejez, sobre sus experiencias de vida y sobre la importancia de la poesia para salir adelante y no sentirse tan viejo. Entre algunas de las bellas frases que nos dejó este brillante porta uruguayo están las siguientes, las cuales quiero compartir con ustedes:

“El espejo no miente, ahí uno va viendo las nuevas arrugas, las bolsas de los ojos... y sin embargo, a veces, a pesar de los años que se tengan, el espíritu de un cuento o de un poema puede seguir siendo joven”.

“La vida es un paréntesis entre dos nadas. Yo soy ateo, no creo en Dios ni nada por el estilo. Hay gente que tiene sus creencias religiosas y tiende a sentir que después de la muerte está el Paraíso, o el Infierno, porque muchos han hecho mérito para ir al Infierno. Yo creo en un dios personal, que es la conciencia: a ella es a la que le debemos rendir cuentas cada día”.

Aquí he recopilado otras frases de Mario Benedetti, para quienes gusten de su poesía, es bueno también que sepan del hombre detrás del escritor, ya que allí reside el secreto de su creación artística y literaria.

“Un poema que tiene alegría, que tiene una cosa vital, lo rejuvenece a uno”.

“Muchas veces al escribir una historia de amor, aunque sea inventada: uno vuelve a sentir otra vez una cantidad de sentimientos que creía olvidados”.

“Hoy, por primera vez, soy bastante pesimista, a pesar de haber sido siempre un optimista por vocación. Creo que si la humanidad sigue por ese camino llegara al suicidio”.

“Si hay una frase hecha que tiene vigencia en mi niñez y en mi vejez es esa de que el poder corrompe”.

“La globalización política y económica está en boca de todos, pero nadie habla de la globalización de la hipocresía y de la frivolidad”.