Frases célebres de Jorge Luis Borges

Jorge Francisco Isidoro Luis Borges ha sido “el mejor” escritor, poeta, crítico y ensayista que haya tenido la Argentina. Ah encantado con sus palabras al lector argentino y mundial que se ha dejado embrujar con su poesía, sus cuentos y sus relatos.
A continuación comparto algunas frases y pensamientos del mejor escritor de todos los tiempos.

“tú que viniste no en el rígido ayer, sino en el incesante presente, en el último punto y ápice vertiginoso del tiempo.”

“He cometido el peor pecado que uno puede cometer. No he sido feliz.”

“A los lados del tren, la ciudad se desgarraba en suburbios; esta visión y luego la de jardines y quintas demoraron el principio de la lectura.”

“Se abrazaron, casi llorando. Ahora los ataba otro círculo: la mujer tristemente sacrificada y la obligación de olvidarla.”

“Ya casi no soy nadie, soy tan solo ese anhelo que se pierde en la tarde. En ti esta la delicia como está la crueldad en las espadas.”

“Tú que ayer solo eras toda hermosura, eres también todo amor, ahora.”

Jorge Luis Borges, el inigualable autor argentino nacido en 1899 y muerto en 1986, fue sin dudas uno de los más célebres escritores del siglo XX.

Fue autor de libros memorables como El Aleph, sólo por mencionar algunos. No era amante de la novela ya que sostenía que los relatos largos eran tediosos.

Arremetió contra otros escritores de su época con los que no tenía afinidad política y literaria y dijo cosas como ésta: “Yo no hablo de venganzas ni perdones, el olvido es la única venganza y el único perdón”.

Se casó de grande con quien fue su dama de compañía, María Kodama, de la que siempre dijo que era una mujer bella por dentro que lo extasiaba cuando estaba a su lado hablándole de literatura: “Al cabo de los años he observado que la belleza, como la felicidad, es frecuente. No pasa un día en que no estemos, un instante, en el paraíso”.

Jorge Luis Borges siempre muy áspero y crítico en sus palabras, sobre todo cuando se traba de política y de literatura. El inteligente y agudo escritor dijo:

“El tiempo se puede enfermar cuando viene el aburrimiento en la pareja. Si enfermase el tiempo entre los dos, el beso no sería lo mismo, el beso no sabría que hacer, a que boca fresca mi beso besaría si enfermase el tiempo”.

Otras de sus frases fueron:
“El ajedrez es uno de los medios que tenemos para salvar la cultura, como el latín, el estudio de las humanidades, la lectura de los clásicos, las leyes de la versificación, la ética. El ajedrez es hoy reemplazado por el fútbol, el boxeo o el tenis, que son juegos de insensatos, no de intelectuales”.

También dijo, en una frase muy poética: “Vino, enseñarme el arte de ver mi propia historia, como si esta ya fuera ceniza en la memoria”.

Se considera a Jorge Luis Borges como uno de los precursores de las vanguardias argentinas, lo que signó poderosamente la cuestión de la narrativa latinoamericana en los años 50 y 60. Fue uno de los directores de la emblemática revista Martín Fierro, edición que sería decisiva para alimentar a la gran camada de sorprendentes escritores que surgieron de Argentina y Uruguay.

Otras de sus frases inolvidables fueron:

“Dicen que soy un gran escritor. Agradezco esa curiosa opinión, pero no la comparto. El día de mañana, algunos lúcidos la refutarán fácilmente y me tildarán de impostor o chapucero o de ambas cosas a la vez”.


“Que otros se jacten de las páginas que han escrito; a mi me enorgullecen las que he leído”.

“La duda es uno de los nombres de la inteligencia”.

“Quienes dicen que el arte no debe propagar doctrinas suelen referirse a doctrinas contrarias a las suyas”.

No solo los libros de este genial escritor argentino han quedado para la historia, sino tambien sus frases. Hablo de Jorge Luis Borges, quien no fue acreedor del premio Nóbel de Literatura pese a haber sido uno de los más grandes autores de habla hispana.

“Si de algo soy rico es de perplejidades y no de certezas”.[/I]

Fue un hombre polémico, que se enfrentó con quienes no coincidían son sus pensamientos filosóficos, políticos y literarios. Algunas de sus frases fueron:

“La paternidad y los espejos son abominables porque multiplican el número de los hombres”.

“Yo siempre seré el futuro Nóbel. Debe ser una tradición escandinava”

“Las biografías: Son el ejercicio de la minucia, un absurdo. Algunas constan exclusivamente de cambios de domicilio”.

“Nadie es patria, todos lo somos”.

“He firmado tantos ejemplares de mis libros que el día que me muera va a tener un gran valor uno que no lleve mi firma”.

La polémica siempre fue lo que generaban sus declaraciones. Jorge Luis Borges no las escribía, e incluso, en numerosas entrevistas en las que lanzó sus frases como dagas, parecía no pensarlas.

Debatía y polemizaba sobre la vida, la literatura, las traducciones de los clásicos, los autores anglosajones de enigma y sobre todo aquellos concerniente a los conflictos de las sociedades. Otras de sus frases fueron:

“Si viéramos realmente el Universo, tal vez lo entenderíamos”.

“El tiempo es el mejor antologista, o el único, tal vez”.

“La felicidad no necesita ser transmutada en belleza, pero la desventura sí”.

“Soñar es la actividad estética más antigua”.

“La literatura no es otra cosa que un sueño dirigido”.

“Ordenar bibliotecas es ejercer de un modo silencioso el arte de la crítica”.

“El tiempo es la materia de la que he sido creado”.

“Creo que con el tiempo mereceremos no tener gobiernos”.

Jorge Luis Borges fue, sin dudas, uno de los intelectuales más destacados de Latinoamérica y del mundo. Realizó análisis y estudios sobre innumerables temas relacionados con el idioma y la narrativa como silogismos, éticas narrativas, matemáticas imaginarias, traducciones y una vasta lista de temas relacionados con la literatura.

Fue una mente brillante, a la que acompañó su destreza en las palabras y su eterno ritual de polemización ante la prensa. Otras de sus frases fueron:

“Quizá haya enemigos de mis opiniones, pero yo mismo, si espero un rato, puedo ser también enemigo de mis opiniones”.

“La Biblioteca es una esfera cuyo centro cabal es cualquier hexágono, cuya circunferencia es inaccesible”.

“Las tiranías fomentan la estupidez”.

“No eres ambicioso: te contentas con ser feliz”.

“Yo creo que habría que inventar un juego en el que nadie ganara”.

“El infierno y el paraíso me parecen desproporcionados. Los actos de los hombres no merecen tanto”.

Jorge Luis Borges quedó ciego a los 55 años, pero eso no impidió que siguiera escribiendo, estudiando y, sobre todo, que continuara con sus reiteradas frases polémicas cada vez que se le preguntaba por su ideología política o religiosa.

Dicen que fue justamente, sus contrariedades políticas lo que no le permitió que la academia sueca le entregara en premio Nóbel de Literatura.

Algunas de sus frases fueron:


“Yo no bebo, no fumo, no escucho la radio, no me drogo, como poco. Yo diría que mis únicos vicios son El Quijote, La divina comedia y no incurrir en la lectura de Enrique Larreta ni de Benavente”.


“Siempre he sentido que hay algo en Buenos Aires que me gusta. Me gusta tanto que no me gusta que le guste a otras personas. Es un amor así, celoso”.

“Hay comunistas que sostienen que ser anticomunista es ser fascista. Esto es tan incomprensible como decir que no ser católico es ser mormón”.

Entre los ensayos sobre narrativa argentina escritos por Jorge Luis Borges se encuentran “Fervor de Buenos Aires” y “Luna de enfrente”, entre otros. En estos trabajos, Borges desarrollaría un agudo sentido de las raíces argentinas y su ascendencia europea, y de cómo ello influyó en sus estudios y en el manejo maravilloso del idioma español.

Siempre fue polémico, como ya he dicho y jamás se cansó de decir lo que sentía sin tener en cuenta si alguien podía sentirse herido por ello. Otras de sus frases famosas y conflictivas fueron:

“Me gustaría ser valiente. Mi dentista asegura que no lo soy”.


“La Universidad debiera insistirnos en lo antiguo y en lo ajeno. Si insiste en lo propio y lo contemporáneo, la Universidad es inútil, porque está ampliando una función que ya cumple la prensa”.

“Que cada hombre construya su propia catedral. ¿Para qué vivir de obras de arte ajenas y antiguas?”

Una de las grandes cuestiones que llevaron a Jorge Luis Borges a ser una personalidad un tanto rechazada por las masas en su país, fue su oposición abierta al gobierno de Juan Domingo Perón, contra el que públicamente se manifestó en más de una opostunidad. Al respecto Jorge Luis Borges dijo:

“Las dictaduras fomentan la opresión, las dictaduras fomentan el servilismo, las dictaduras fomentan la crueldad; más abominable es el hecho de que fomenten la idiotez. Botones que balbucean imperativos, efigies de caudillos, vivas y mueras prefijados, ceremonias unánimes, la mera disciplina usurpando el lugar de la lucidez... Combatir estas tristes monotonías es uno de los muchos deberes del escritor ¿Habré de recordar a los lectores del Martín Fierro y de Don Segundo Sombra que el individualismo es una vieja virtud argentina?”.

También dijo:

“Hay que tener cuidado al elegir a los enemigos porque uno termina pareciéndose a ellos”.

“Hay derrotas que tienen más dignidad que la victoria”.

El reconocimiento mundial de Jorge Luis Borges como intelectual llegó alrededor de la década del 50. Justamente en ese año, en el siglo XX, fue el directo de la Sociedad Argentina de Escritores, la SADE, uno de los organismos más importantes de literatura en Latinoamérica y en el mundo.

Era llamado continuamente para brindar seminarios y conferencias internacionales y sus libros se comenzaron a editar en idiomas inglés y francés, con imparable éxito y recibiendo del público lector extranjero.

Algunas de sus palabras fueron:

“Felices los valientes, los que aceptan con ánimo parejo la derrota o las palmas”.


“El verbo leer, como el verbo amar y el verbo soñar, no soporta 'el modo imperativo”.

“He sospechado alguna vez que la única cosa sin misterio es la felicidad, porque se justifica por sí sola”.

“Uno no es lo que es por lo que escribe, sino por lo que ha leído”.

En el año 1956 Jorge Luis Borges fue nombrado profesor titular de la cátedra de Literatura Inglesa en la Universidad de Buenos Aires. Años más tarde publicaría los libros “Manual de zoología fantástica” y “EL hacedor”. Siempre mantuvo su ironía en todo cuanto opinaba. También sostuvo con vehemencia su oposición al género de la novela, diciendo que muchas paginas en un libro sobre el mismo tema eran señal de hastío o de mera rutina.

Otras de sus frases fueron:


“Yo creo que es mejor pensar que Dios no acepta sobornos”.

“No está enamorado cuando se da cuenta de que otra persona es única”.

“Yo no hablo de venganzas ni perdones, el olvido es la única venganza y el único perdón”.

“Siempre imaginé que el Paraíso sería algún tipo de biblioteca”.

“Al cabo de los años he observado que la belleza, como la felicidad, es frecuente. No pasa un día en que no estemos, un instante, en el paraíso”.

En cuanto a su vida privada, nunca se supo demasiado de Jorge Luis Borges. Hay quienes dicen que era homosexual o que la relación con su madre era bastante traumática y por ella no podía tener relaciones amorosas con otras mujeres. No obstante se casó con quien fue su ayudante, María Kodama, quien además fue la curadora de sus obras.

Otras de las frases más recordadas en cuanto a lo que fue su vida sentimental es:

“He cometido el peor pecado que uno puede cometer. No he sido feliz”.

También habló sobre la muerte y la vida, sobre el amor y el placer, sobre los libros y los clásicos:

“La muerte es una vida vivida. La vida es una muerte que viene”.

“La belleza es ese misterio hermoso que no descifran ni la psicología ni la retórica”.

“Todas las teorías son legítimas y ninguna tiene importancia. Lo que importa es lo que se hace con ellas”.

Otra de las frases del magnífico escritor argentino, Jorge luis Borges fueron:

“La patria, los azares de los mayores, las literaturas que honran las lenguas de los hombres, las filosofías que he tratado de penetrar, los atardeceres, los ocios, las desgarradas orillas de mi ciudad, mi extraña vida cuya posible justificación está en estas páginas, los sueños olvidados y recuperados, el tiempo”.

“La prosa convive con el verso; acaso para la imaginación ambas son iguales”.

“Antes las distancias eran mayores porque el espacio se mide por el tiempo”.

“Somos nuestra memoria, somos ese quimérico museo de formas inconstantes, ese montón de espejos rotos”.

“La poesía lírica no ha hecho otra cosa hasta ahora que bambolearse entre la cacería de efectos auditivos o visuales, y el prurito de querer expresar la personalidad de su hacedor”.

“Casi todos escribíamos sin signos de puntuación. Hubiera sido mucho más interesante inventar nuevos signos, es decir enriquecer la literatura”.

Hoy quiero compartir con ustedes algunas reflexiones y pensamientos sobre literatura del brillante escritor argentino Jorge Luis Borges. Fue crítico, escritor, periodista y traductor de los grandes clásicos de la literatura universal:
“Yo diría que son excesivamente generosos cuando piensan en mí”.
“La juventud es una etapa de incertidumbre, de ingenuidad y, en general, de desdicha”.
“Cuando yo era joven la política nos interesaba muy poco”.
“Todo conservador es una persona tolerante, y un poco escéptica. El comunismo y el nacionalismo fomentan el fanatismo, la intolerancia”.
“El fanatismo no es un mal congénito del hombre porque hay épocas en que no se ha dado. No hay panaceas para remediarlos, eso depende de cada uno”.
“Si viviese en la irrealidad sería muy interesante, pero, hasta ahora, no ha sucedido”.
“Mi posición política siempre ha sido clara. He sido adversario del comunismo, del nacionalismo, del antisemitismo y, desde luego, de cierta dictadura de la que prefiero no acordarme”.

Si bien Jorge Luis Borges es considerado uno de los escritores más influyentes del siglo XX, no recibió el Premio nobel e Literatura. Sí estuvo a punto de hacerlo, pero la academia sueca al final de cuentas nunca se decidió por él, lo que fue una injusticia, en verdad. Otros de sus pensamientos son:

“Cuando escribo un cuento o un poema, estoy pensando en ese cuento o en ese poema. No creo que estoy, como dicen, “encerrado en una torre de marfil”.

“La creación requiere una amplia libertad, más allá de las opiniones del lector que son, por lo demás, lo más superficial que hay en él”.

“Creo que la realidad no está compuesta exclusivamente por obreros, sino por todas las clases sociales; por ejemplo, la clase media a la que nunca se la toma en cuenta. Le falta, tal vez, prestigio romántico”.

“La idea de la aristocracia y la idea de lo que se llama pueblo tienen cierto prestigio. La idea de la clase media es escasamente encantadora”.

Una de las características de la narrativa de Jorge Luis Borges era que nunca escribió una novela, decía que muchas páginas en un mismo libro, sobre un mismo tema, era señal de hastío o de rutina, lo cual llevaba al aburrimiento del lector. Sin embargo hizo muchos prólogos a novelistas reconocidos pero nunca cambió de parecer respecto al género. Más frases de Jorge Luis Borges:

“El presente es siempre atroz. No creo en la edad de oro ni en la “belle époque”. Para quienes tuvieron que vivirla, la “belle époque” no fue una época particularmente feliz. Las personas que vivían en el año 90 no se sentían especialmente felices. Nadie se siente feliz en el presente”.

“La felicidad corresponde más bien al pasado, a la nostalgia, a la esperanza. En otras épocas la gente no tenía conciencia histórica del tiempo en que estaba viviendo. En cambio ahora, estamos pensando constantemente en el momento histórico que vivimos y eso no nos hace ni muy sabios, ni muy felices”.

Su posición política fue tal vez una de las cosas que hizo que Jorge Luis Borges no se hiciera querer, sobre todo en su país y en el resto de los países de Latinoamérica que a fines de la década del 50 luchaban por las revoluciones. Aquí hay más frases de Jorge Luis Borges:

“No creo que la guerra sea necesariamente un mal. La historia argentina es una historia épica, es una historia de guerras”

“El pueblo y la aristocracia se parecen, son casi iguales: los mismos prejuicios, el mismo nacionalismo”.

“Aún en el país se piensa que el pueblo es el gaucho. Ya no hay gauchos, pero este detalle no se toma en cuenta”.

“Tenemos que salvarnos nosotros mismos cumpliendo con nuestro deber”.

“Si me hubiera dedicado a ser buzo, no habría sido uno muy eminente; tropero, tampoco; sargento, tampoco; político, menos que nada”.

“No me interesa absolutamente nada. Yo espero ser olvidado, definitivamente”.

Entre los poetas más amados por Jorge Luis Borges estaban William Shakespeare y Oscar Wilde., a los que también tradujo al español. Era un fanático de las novelas policiales y fundó una colección en Buenos Aires que reunía a los maestros de género. Otras de sus frases fueron:

“Y es que una persona que se dedica a hacerse popular, a hacerse retratar, a que voten por él, no puede ser una persona muy compleja”.

“Yo no he hecho política literaria, no he fomentado que se hable de mis libros, ni de mí. Pero es algo que ha sucedido y me siento agradecido y hasta atónito”.

“Creo que hay una superstición en eso de leer libros contemporáneos”.

“Schopenhauer decía que “no hay que leer ningún libro que no haya cumplido cien años porque no podemos saber si es bueno o malo”. Claro que al mismo tiempo se quejaba de que no hubiesen leído sus libros, que no habían cumplido cien años…”.

Jorge Luis Borges nación en 1899 y murió a los 86 años en 1986. Su legado de obras, análisis, estudios y traducciones es realmente magnífica. Fue también director por muchos años de la Biblioteca Nacional Argentina, una de las instituciones de ese tenor más importantes de Latinoamérica y del mundo. Algunas de sus frases y pensmaientos fueron:

“Los jóvenes como los adultos estamos totalmente a la deriva. Yo no sé qué puedo hacer para ayudar al país. Tengo la máxima voluntad y la mayor incapacidad”.

“No creo en el perdón. Si yo obro mal, y me perdonan, el perdón es ajeno y no puede mejorarme a mí. De modo que ser perdonado no tiene importancia”.

“Ser castigado, puede sí servirme. Puede ayudarme a pensar en lo mal que he obrado. Creo que hay un solo don que se aplicaría igualmente al perdón o a la venganza y es el olvido”.

Respecto a la inclinación religiosa de Jorge Luis Borges, jamás profesó o se identificó con religión alguita. En algunas entrevistas, cuando le preguntaban por ello, decía que era ateo. En otras, que era agnóstico. Pero siempre fue muy peculiar con su manera de referirse a las religiones y todo lo que tenía que ver con la política y la fe. Otras frases de Borges son:

“Como argentino, tengo mi conciencia tranquila. Fui nombrado director de la Biblioteca Nacional por la Revolución Libertadora, porque sabían que no era peronista. Cuando volvió el gobierno de cuyo nombre prefiero no acordarme, renuncié”.

“Como escritor, trato de escribir lo mejor posible, lo cual no es mucho. Como ser humano soy una especie de antología de contradicciones y errores. Pero tengo sentido ético”.


“Espero desaparecer definitivamente. Y espero además no ser recordado. ¿De qué me sirve morir si van a seguir pensando en mí?”.

Como buen intelectual que se alejaba de lo popular y lo condenaba, era enemigo del fútbol, o de las masas que se sentían identificadas con ese deporte. Sobre ello aseguró:

“El fútbol me parece una forma del tedio. Además al argentino no le gusta el fútbol. Le gusta ver ganar tal o cual cuadro. Fútbol así, no. Yo nunca he oído decir a la gente: “¡Caramba, yo soy de San Lorenzo de Almagro, pero qué bien ha ganado Boca! ¡Qué contento estoy!" Entonces el fútbol no les interesa”.


“No espero ni castigos ni recompensas. El cielo y el infierno me quedan grandes”.

“Es algo muy misterioso. Contar con una persona. Saber que esa persona puede contar con uno. Pero la amistad no significa la frecuentación”.

“Yo diría que el amor no puede prescindir de la amistad. Si el amor prescinde de la amistad es una forma de locura. Una especie de frenesí, un error en suma”.

Algunos de los pensamientos y reflexiones de Jorge Luis Borges respecto al amor y a la amistad son realmente muy interesantes. Por eso es que quiero compartirlos:

“Que en la amistad haya algún elemento del amor puede ser; pero son dos cosas diferentes. El amor exige pruebas sobrenaturales, uno querría que la persona que está enamorada o enamorado de uno le diera pruebas milagrosas de ese amor. En cambio la amistad no necesita de pruebas”.

“Tengo siempre tres o cuatro argumentos de cuentos y los voy sometiendo a tratamientos distintos. Los digo con una inflexión distinta, los sitúo en distintas épocas, distintas circunstancias, y ya son nuevos”.


“Muchas veces cuando uno dice que tal o cual persona es inteligente se refiere más a que es ocurrente, que tiene algo que decir de un tema inmediatamente. Esa persona puede no ser inteligente. La inteligencia puede ser lenta”.

No por humildad, sino más bien por pedantería, Jorge luis Borges decía que nos e consideraba un hombre inteligente, tampoco que era un buen escritor sino que era más bein un buen lector. Lo que da a la reflexión, ya que realmente fue uno de los más brillantes escritores de su tiempo. Otras de sus frases son:

“Si me dan algunos años para pensar, soy inteligente. Si me hacen preguntas como las suyas, inmediatas, soy más bien estúpido”.

“Quizás después del amor quede siempre algo de amor, algo sentimental, algo especialmente grande”.

“La honestidad es tan rara que uno tiene pocas ocasiones de estudiarla. Pero creo que toda persona tiene algo de ejercicios honestos”.

“Yo sé que mi vida ha sido una trama de errores. He pasado gran parte de ella comprobando que los demás tenían razón; sin embargo, he tratado de ser honesto, de no mentir más de lo necesario”.

Otras de las célebres frases del escritor argentino Jorge Luis Borges, que reflejan su pensamiento tan filosófico y particular sobre la vida, el mundo de las letras y el amo fueron:

“Parece que no puede vivirse sin mentiras. No ignoro cínicamente, pero creo haber obrado bien. De modo que me considero una persona proba. He sido indiferente, he sido cruel, sí, pero por estupidez, por negligencia”.


“La patria es algo que se siente, no puede definirse. Yo la siento muy profundamente.
Si la definimos, estamos diluyéndola en palabras”.

“Yo puedo expresarme en inglés, en alemán. Luego la suerte me dio dos idiomas más: el latín que estudié cinco años en la Universidad y el francés, ya que me eduqué en Ginebra. Sé italiano y portugués como lo saben todos aquellos que hablan el español”.

Jorge Luis Borges, debido a un problema de salud, quedó ciego. Fue en el año 1955, cuando coincidió con la Revolución Libertadora en su país. A partir de ese momento, no dejó de escribir ni de leer, y se dedicó también a hacer estudios del lenguaje. Más frases y pensamientos de Jorge Luis Borges para compartir:

“Cuando perdí la vista, en 1955, pensé que eso tenía que ser el principio de algo; recordé que yo llevaba en la sangre un idioma que ya se dejó de hablar hace siglos, el Old English o inglés antiguo. Entonces estudié este idioma sajón. Ahora he pasado al estudio de islandés, afín al anglosajón, pero con una literatura más compleja”.

“Me gusta la literatura de Islandia, es una de las más complejas y también de las más desconocidas. Además Islandia es un país admirable. Yo estuve dos veces y creo que me sentiría feliz viviendo allí”.

Jorge Luis Borges parecía, por momentos, que renegaba de ser argentino, lo que como muchas de sus cosas resultaba una contradicción, porque se dedicó a estudiar y analizar la literatura argentina, siendo un experto en el tema. Otros de sus pensamientos son:

“Gran parte del pueblo argentino. Es que se esperaba no que fuera un gobierno eficaz, sino honesto, que se diferenciara del peronismo. Pero despojaron el país, lo expoliaron, lo destrozaron. Han cometido todos los errores y todos los crímenes posibles. Hasta se habla de 30.000 desaparecidos... Desaparecidos es un eufemismo, pero es decir 30.000 personas, acaso secuestradas, torturadas y tal vez asesinadas. Hasta inventaron una guerra”.

“Soy islandés honorario o trato de serlo. En Islandia tuve una gran satisfacción: salió una noticia en los diarios donde se me nombraba como ”el gran trovador escandinavo”. Confieso que me llenó de orgullo”.
“En los hábitos literarios también es todopoderosa la idea de un sujeto único. Es raro que los libros estén firmados”.

Está visto que a Jorge Luis Borges o se lo ama o se lo rechaza y que parta amarlo, hay que dejar a un costado su personalidad y sus inclinaciones políticas. Creo que si nos ponemos a pensar un poco en por qué no fue acreedor del Premio Nobel de Literatura, nos daremos cuenta que ello fue a causa de sus malos modales par responder y hablar acerca de las minorías. Otras frases de Borges son:

"La tarea del escritor es solitaria. Pero me di cuenta que fui leído. Entonces uno se hace de amigos invisibles. Y uno se da cuenta que lo quieren a uno. Son amigos míos, a pesar de haber leído mis libros".

"Fui traducido al japonés, al finlandés, al islandés. Yo no sé qué explicación tiene. Si es que hay alguna explicación en el mundo".

"Estoy cansado de vivir. Querría que los astros me pararan. Pero antes quiero concluir varias cosas. Sobre todo, me gustaría conocer físicamente la China y la India".

Jorge Luis Borges no era un escritor que acostumbraba a dar entrevistas a los periodistas. De hecho, fueron pocos los periodistas que quisieron entrevistar al gran escritor, ya que solía burlarse de ellos o contestarles con ironía. Otras de las frases de Borges fueron:

"El Borges oral es tartamudo, imperfecto. En cambio, el Borges escrito es muy palabrero".

“La clase media es la mejor. Es tan deplorable que en un país haya millonarios como que haya mendigos".

"Mi madre siempre estuvo preocupada por mi felicidad. Yo nunca fui feliz, siempre fingí serlo. Por eso pensé que la había defraudado".

"Uno por cortesía tendría que tratar de no tener razón en las discusiones".

"Prefiero las obras ajenas a las propias. Publicamos para no pasarnos la vida leyendo borradores".

“Sucede que yo siempre he contestado sinceramente. Y todo el mundo prefiere suponer que esas contestaciones mías son bromas o ironías”.

No obstante a que todos los periodistas y reporteros del mundo decían que Jorge Luis Borges les tomaba el pelo, ya que nunca contestaba una pregunta de manera igual dos veces. Una vez, un reportero se lo preguntó a eso de por qué les tomaba el pelo en las entrevistas, a lo que Borges respondió:

“Yo soy una persona educada, no le tomo el pelo a nadie. Y espero que no me lo tomen, tampoco”.

“Si se tratara de un problema matemático nadie supondría que la mayoría de la gente puede resolverlo. En política, sin embargo, sí se supone que la mayoría tiene la razón. Eso se vio en mi país, cuando el que sabemos obtuvo nueve millones de votos…”.

“Un rufián muerto sigue siendo un rufián. Y un cobarde muerto no es un valiente. La muerte no beneficia tanto. Aunque yo en una milonga digo: no hay cosa como la muerte para mejorar la gente”.

Como bien se ha dicho en varios de estos post, Jorge Luis Borges siempre aseguro que no creía en Dios, ni profesó nunca ninguna religión. Sobre ello, el escritor dijo:

“Yo ahora estoy seguro de que no hay otra vida y que no hay Dios. Es una certidumbre que me satisface, me tranquiliza. Saber que todo esto pasará, que yo me olvidaré, que seré olvidado… Yo soy un hombre ético pero no religioso”.

“Me conduce a la esperanza de que no haya Dios y que no haya otra vida. Desde luego, las Sagradas Escrituras, llamémoslas así, aconsejan vivir hasta los 70 años. Yo he cumplido 79. Recuerdo cuando mi madre cumplió 98 años —ella murió a los 99— y me dijo: «¡Caramba, se me fue la mano!»”.

“Lo que me parece raro es que la gente sea tan indulgente conmigo. A mí no me gusta tanto lo que yo escri¬bo. Claro que eso le pasa a todo escritor”.

Otro de los mitos que giraban en torno de Jorge Luis Borges, era la relación que él tenía con su madre, quien era posesiva al extremo. Muchos dicen que el escritor argentino era homosexual, aunque nunca se dijo públicamente y mucho menos el autor lo reconoció. Algunos de sus pensamientos fueron:

“Como dijo Chesterton lo único que sabemos de Edipo es que no padecía del complejo… Yo tengo un recuerdo tan puro y tan grato de mi madre. Ella ha muerto hace tres años. Yo no he querido cambiar nada de su pieza. Y cada vez que vuelvo a casa me asombro de que ella no esté esperándome”.

“No conozco a Carpentier. En cuanto a mis opiniones políticas, no creo que tengan importancia. Cuando escribo trato de prescindir de mis opiniones. La literatura es una operación misteriosa”.

“Yo tengo mi conciencia clara. Nadie puede tomarme por comunista, por fascista, por nacionalista…”.

La obra y ida de Jorge Luis Borges despertó el interés de muchos estudiosos y analistas de la literatura y el lenguaje. Sin embargo, el escritor argentino decía que nunca había leído ningún libro que hayan escrito sobre él, ya que no le gustaba hacerlo. Más frases y pensamientos de del brillantes autor argentino:

“Se han escrito libros sobre mí y yo no he leído ninguno. Alicia Jurado escribió un libro sobre mí, que me aseguran que es muy bueno, y yo le dije: «Alicia, tú sabes que leo todo lo que escribes pero en este caso no voy a leer tu libro porque se trata de un tema que no me interesa o que, quizá, me interesa demasiado»”.

“Recuerdo aquí algo que dijo uno de mis autores preferidos, Kipling: «A un escritor le está permitido componer fábulas, pero no puede saber cuál es la moraleja». Es decir, un escritor no puede saber cuál será el resultado de lo que escribe en la mente de otros”.

Una de las cosas que llevó a que Jorge Luis Borges fuera recado en muchos sitios, fue su inclinación política. Defendía los gobiernos militares y en una ocasión hasta defendió a Augusto Pinochet. Otros de sus pensamientos fueron:

“Ser conservador es una forma de ser escéptico. Cuando me afilié al partido conservador dije algo que molestó…”.

“Yo creo que Pinochet es un buen gobernante. Ese es el único Gobierno posible, así como el de Videla es el único Gobierno posible en Argentina. Estoy hablando de determinados países en determinadas épocas. ¿Pero por qué importan tanto mis opiniones políticas?”.

“Yo tengo mi conciencia cívica limpia. Por ejemplo, yo era director de la Biblioteca Nacional, que es un cargo no bien rentado pero muy visible. Cuando supe el resultado de ciertas elecciones, renuncié. Mi madre me dijo: «No podés servir a Perón decorosamente». Claro que no, le dije yo”.

Jorge Luis Borges quedó ciego en el año 1955, cuando tenía 56 años de edad. Eso lo marcó mucho en su vida, ya que una de las cosas que más amaba era la lectura. Sin embargo, decía que nunca dejaba de leer porque todos los días sus amigos lo visitaban y les leían. Otras frases de Jorge Luis Borges son:

“Mis amigos me dicen que soy un intruso en la poesía. Yo creo que no. En todo caso, mi poesía es más inmediata y más íntima que mi prosa”.

“La prosa siempre ha sido un objeto que yo he fabricado. Pero tengo la impresión que la poesía es algo que sale directamente de mí. Ahora, ¿qué haríamos sobre ese prólogo a Lugones? ¿A usted qué le parece? ¿Es poesía o es prosa? Creo que la diferencia es formal. De al¬guna manera es poesía también, ¿no?”.

“No soy frío. Desgraciadamente, soy incapaz de pensamientos abstractos”.

Jorge Luis Borges, fue, efectivamente, un gran lector ya que realizó muchos estudios y análisis sobre distintos autores argentinos e ingleses. Entre las lecturas que más le agradaba estaba la inglesa. Sobre sus gustos literarios, Borges dijo:

“He leído a los filósofos, pero me dejo llevar por la belleza de una frase. «Peregrina paloma imaginaria / que enardeces los últimos amores / alma de luz, de música y de flores / peregrina paloma imaginaria…»”.

“El otro día encontré esta metáfora, que es tan hermosa: «Si no me hubieran dicho que era el amor yo habría creído que era una espada desnuda». ¿No es lindo y terrible? «Si no me hubieran dicho que era el amor yo habría creído que era una espada desnuda»•.

“Cuando un verso es muy bueno ya no pertenece a nadie ¿no? Se diría que cuando un verso es característico del autor ya no es excelente”.

Sobre el plagio y aquello de usar las citas de otros autores, Jorge Luis Borges tenía una particular manera de pensar, lo que llamaba mucho la atención, teniendo en cuenta la calida de este escritor. Otras frases suyas fueron:

“Aunque, en verdad, la palabra plagio es errónea. El idioma es una serie de plagios, de convenciones. En la escultura, por ejemplo, todas las estatuas ecuestres serían pla¬gios de la primera estatua ecuestre. Todos los cuadros de la Virgen y el Niño se parecen. Y en literatura hay tan pocos temas”.

“Creo que nuestro deber es no ser desdichados. Yo he escrito muchas letras de milongas y en una de ellas, que trata de un compadrito al que lo mataron, digo: «Entre otras cosas hay una, de la que no se arrepiente nadie en la Tierra; esa cosa es haber sido valiente. Siempre el coraje es mejor, nunca la esperanza es vana”.

Las obras de Jorge Luis Borges constituyen un gran legado para la humanidad. Sus poesías son realmente bellas, además de que fundaron una corriente literaria poética que fue el ultraísmo. En cuanto a sus cuentos, los relatos breves de Jorge Luis Borges se hacer can a la perfección, sin ninguna duda. Más frases de Borges para compartir:

“Creo que fuera de tres o cuatro libros podría prescindir de la literatura española. La literatura española comenzó admirablemente. El romancero es admirable. Fray Luis de León es un gran poeta. San Juan de la Cruz también. Y luego… Garcilaso repite lo que había hecho en Italia. Y con Quevedo y Góngora todo se vuelve rígido, ya empieza lo barroco. De todo esto se salva El Quijote, sobre todo su segunda parte. Lo demás de Cervantes es horroroso”.

“El tango no puede ser sentimental. Nace en los prostíbulos y las pri¬meras letras son muy obscenas”.