Frases de “El cuaderno dorado” de Doris Lessing

“El cuaderno dorado” de Doris Lessing es una de sus novelas más famosas ya que reúne dos tópicos muy importantes de la literatura y de la política ya que reúne la política y el feminismo dentro de un mundo que es literatura.
Las dos mujeres estaban solas en el piso londinense.
—El caso es que —dijo Anna al volver su amiga de hablar por teléfono en el
recibidor—, el caso es que por lo visto todo se está desmoronando.
Molly era una mujer adicta al teléfono. Cuando éste empezó a llamar
acababa de preguntar: «Bueno, ¿qué me cuentas?». Y ahora volvía diciendo:
—Es Richard, que viene. Al parecer hoy es el único día libre que va a tener
en todo el mes. Por lo menos eso es lo que dice.
—Pues yo no me voy —dijo Anna.
—No, tú te quedas donde estás.
Molly examinó su aspecto: llevaba pantalones y un jersey, ambas prendas
bastante usadas.

A continuación comenzaré a compartir algunos de los fragmentos más importantes de la novela de Doris Lessing, ya que los diálogos que se dan entre estas dos mujeres nos dejarán infinitas preguntas y respuestas sobre el mundo femenino.
—En el fondo, yo siempre pensaba: «Bueno, me casaré, así que no importa que eche a perder todas las aptitudes con que nací». Hasta hace poco, incluso soñaba en tener más niños... Sí, ya sé que es idiota, pero es verdad. Y ahora tengo cuarenta años y Tommy ya es mayor. Pero lo importante es que si tú no escribes tan sólo porque piensas en casarte...
—¡Pero si las dos queremos casarnos! —dijo Anna, bromeando. El tono jocoso volvió a prestar distancia a la conversación; había comprendido, con pena, que no podría discutir ciertos temas con Molly. Molly sonrió secamente, dirigió a su amiga una mirada de reproche y
concluyó:
—Muy bien, pero te arrepentirás más tarde.

He aquí otros fragmentos de la novela de Lessing donde podemos observar qué significa el matrimonio para una de estas mujeres…
“Richard era el marido de Molly; o, mejor dicho, lo había sido. Molly era el producto de lo que ella llamaba «uno de aquellos veinte matrimonios». Su madre y su padre habían brillado muy brevemente en los círculos bohemios e intelectuales, cuyos focos lumínicos eran Huxley, Lawrence, Joyce, etc. Su infancia había sido desastrosa, pues el matrimonio duró sólo unos meses.”
“Ella se había casado a los dieciocho años con el hijo de un amigo de su padre. Ahora sabía que lo hizo por alcanzar cierta seguridad e, incluso, respetabilidad. Tom, su hijo, era un producto de aquel matrimonio. A los veinte años, Richard ya había dado indicios de convertirse en el sólido hombre de negocios que finalmente había resultado; por lo tanto, Molly y él no toleraron aquella mutua incompatibilidad durante más de un año.”

He aquí algunas frases sobre la amistad de Molly y Anna, las dos protagonistas de la novela de Doris Lessing.
“Cuando las dos mujeres salían juntas, Anna se eclipsaba deliberadamente y contribuía a que el dramatismo de Molly se luciera. Cuando estaban solas, ella solía dominar al comienzo de la amistad entre las dos.”
“Molly, brusca, directa, sin tacto, había dominado francamente a Anna. Poco a poco, y a ello habían contribuido los buenos oficios de Madre Azúcar, Anna había aprendido a ser dueña de sí misma. Pero a veces hubiera debido contradecir a Molly y no lo hacía. Ella misma reconocía que era cobarde; prefería siempre ceder antes de provocar peleas y escenas.”
“Una pelea deprimía a Anna durante días, mientras que a Molly le sentaban estupendamente. Rompía a llorar a gritos, decía cosas imperdonables, y al cabo de medio día se olvidaba de todo. Mientras tanto, Anna, exhausta se quedaba en el piso, reponiéndose."

“El cuaderno dorado” de Doris Lessing es uno de los pocos libros que me ha permitido ingresar, conocer y respetar más el universo femenino. Creo que es una de las pocas autoras que logró unir el mundo de las mujeres envuelto en política y dolor.
Es una buena opción poder compartir algunas frases, todos vamos a poder ingresar cada vez más en ese universo de una de las autoras más importantes de los últimos tiempos, quien a pesar de haber fallecido hace sólo un breve tiempo ha logrado perpetuarse en el mundo literario.
He aquí alguna de sus mejores frases de “El cuaderno dorado”:
“— ¡Dios mío! — Exclamó Richard—. Hablar con vosotras dos es como hablar con un par de salvajes.”
“— ¡Pero si no despreciamos la economía! Es demasiado... anónima para despreciarla. Nosotras te despreciamos a... —Molly suprimió la palabra ti, y como si se diera cuenta de que cometía una falta de educación, hizo que sus manos abandonaran aquella actitud de silenciosa impertinencia.”

Algunas frases más de la novela de Doris Lessing
“—Éste es el problema, que tú hablas y hablas, pero estás tan lejos de lo real... Nunca entiendes nada.” “Él no decía nada. Parecía fascinado por el espectáculo de las dos mujeres, ostentosamente hostiles a él; una cómica pareja unida en su aversión. Llegó incluso a dar pruebas de asentimiento con la cabeza, como si dijera: «Bien, seguid».”

A continuación uno de los personajes femeninos describe al personaje másculino, vean como lo hace, como lo desmerece, pareciera que dentro del mundo femenino los hombres, más cuando han lastimado y forman parte de una historia pasada, no son bienvenidos:

“Como todos sabemos, Richard se casó con una mujer inferior a él... No en el aspecto social, no...; bastante se cuidó él de no hacer tal cosa..., sino, según sus mismas palabras, con una mujer agradable y sencilla, aunque afortunadamente provista de toda una serie de lords y ladies esparcida por las ramas colaterales de la familia, muy útiles, qué duda cabe, para dar nombre a las empresas."

Observen, a continuación, como las mujeres resaltan la mediocridad de la mujer casada que no refuta nada, creo que en esta parte la autora pone en relieve la falta de compromiso de algunas mujeres:
“—Claro que casi todos los hombres que conocemos están casados con mujeres agradables, sencillas y deprimentes. Es una pena, pobres. La verdad, Marion es una persona excelente, nada tonta, aunque ha estado casada durante quince años con un hombre que la hace creerse estúpida...”
“—¡Qué harían estos hombres sin sus estúpidas esposas! —comentó Anna suspirando.”

Doris Lessing lo ha dicho más de una vez, no es ninguna feminista, no significa que hablando mal del matrimonio sea feminista creo que en esta novela lo que pone de relieve es que hubo muchas mujeres que en momentos de lucha no se han comprometido con la causa y han preferido cegarse de todo lo demás estando casadas…

La novela es un gran enredo y cada uno de sus personajes logra describirlo a la perfección:

“Anna nunca había pensado que Tommy pudiera ser capaz de manifestar malicia o despecho, y tenía la impresión de que había un extraño en el cuarto. Incluso su cara era extraña, pues ofrecía una expresión obstinada, oscura y torpe, deformada por una careta de despecho sonriente”

A continuación se comienza a desprender del discurso de los personajes la política y la revolución:

“De todas maneras, le he dicho que no perdiera el sueño por mí, porque yo no iba a organizar ninguna revolución. Hace veinte años, sí. Pero ya no. Porque ahora sabemos lo que les sucede a los grupos revolucionarios... Nos asesinaríamos mutuamente al cabo de cinco años.”

Aquí se comienza a describir los lugares políticos que ocupa la política en la obra de Doris Lessing, pareciera como un velo que se desprende del discurso de sus protagonistas, ¿No lo creen?

Creo, sinceramente, que luego de compartir algunas frases con ustedes, algunos fragmentos que ya había, uno puede dar cuenta de que la novela de Doris Lessing:“El cuaderno dorado” es una obra espléndida que le entrega, a sus lectores, innumerables frutos para ver la historia de dos mujeres con sus respectivos dramas, enamoramientos, pérdidas y descubrimientos.
La novela en sí, como ya lo han dicho anteriormente, narra la historia de dos mujeres y todo lo que ello significa, es decir que dos mujeres con una inmensa historia y pasado, entre política, hijos y amores. Una historia completa.
A todos, los lectores, nos gusta leer una buena obra y sostengo, sinceramente, que la obra de Lessing le escapa al feminismo y se adentra a la historia de dos mujeres con muchas cosas por contar y compartir. Es una novela que nos permite sacar nuestras propias conclusiones. ¿Cuáles son las tuyas? ¿Qué te ha pasado a ti con la novela?

Creo que hay un fragmento que resume la novela, es este…¿Qué piensan ustedes?
"Mientras tanto, mi ansiedad es permanente, pues ya no sé lo que es despertarse con normalidad. Pero observo el estado en que me encuentro e incluso pienso: «Bueno, al menos yo nunca sufriré de ansiedad propia, de modo que es mejor que sienta la de otro, ahora que tengo la ocasión». A veces trato de hacer «el juego». A veces escribo en este cuaderno y en el amarillo. O miro cómo cambia la luz del suelo, o cómo un grano de polvo o un nudo en la madera se hacen enormes y se convierten en símbolos de ellos mismos. Arriba, Saúl pasea de Un lado a otro, o bien se producen largos períodos de silencio. Tanto el silencio como el ruido de sus pasos reverbera por entre mis nervios. Cuando sale del piso «para dar un paseíto», mis nervios parecen estirarse y seguirle, como si estuvieran atados a él."