Tema: Frases de Simone de Beauvoir

El segundo tomo correspondiente al trabajo de memorias que escribió la escritora francesa Simone de Beauvoir es el titulado “Una muerte muy dulce”. Este libro se publicó en el 1964. en él hace una evocación de los momentos de su vida al lado de su madre. Casi 20 años más tarde, en 19981, la pensadora publica La ceremonia de los adioses, dedicado al filósofo existencialista Jean Paul Sartre, y luego saldría la luz el libro Conversaciones con Jeuan Paul Sartre. Más fragmentos de sus obras dicen:

“Lo que le ha sido nefasto es que, al no convertirse en una compañera de trabajo para el obrero, ha sido excluida del Mitsein humano: esa exclusión no se explica por el hecho de que la mujer sea débil y de capacidad productora inferior; el macho no reconocía en ella a un semejante porque ella no participaba de su manera de trabajar y pensar y porque permanecía sujeta a los misterios de la vida; dado que no la adoptaba, dado que conservaba ante sus ojos la dimensión del otro el hombre no podía sino hacerse su opresor”.

Las memorias escritas en varios libros, por Simon de Beuvair se completa con otros libros epistolares, cuyo contenido fue recuperado por su ahijada entre los años 1990 y 2004. Se trata de Cartas a Sartre; Cartas a Nelson Algren y Correspondance croisée avec Jacques-Laurent Bost- EL último libro aún no ha sido traducido al idioma español. También está el libro Cartas al Castor y a algunas otras , las cuales están publicadas en dos tomos. En esta última tomó participación el filósofo, Arlette Elkaïm Sartre. Más fragmentos de sus ensayos:

“Porque el hombre es trascendencia, jamás podrá imaginar un paraíso. El paraíso es el reposo, la trascendencia negada, un estado de cosas ya dado, sin posible superación. Pero en ese caso ¿qué haremos? Para que el aire sea respirable tendrá que dejar paso a las acciones, a los deseos, que a su vez tenemos que superar: tendrá que dejar de ser paraíso. La belleza de la tierra prometida es que ella prometía nuevas promesas. Los paraísos inmóviles no pueden prometer más que un eterno aburrimiento”.

Simone de Beauvoir fundó la prestigiosa revista académica Tiempos modernos en el año 1945. Lo hizo en forma conjunta con Jean Paul Sartre, Albert Camus, y M. Merleau-Ponty. Esta publicación se convirtió en un referente político y cultural del pensamiento francés de la época. Luego de esa intervención editorial la escritora publicó la novela Todos los hombres son mortales, como también los libros de ensayo Para una moral de la ambigüedad y América al día. Todos sus libros son referenciales en el pensamiento feminista del siglo XX, siendo hasta la actualidad una de las mujeres más importante en el desarrollo del feminismo mundial.

Más de sus frases y pensamientos:

“La voluntad macho de expansión y dominación ha transformado la incapacidad femenina en una maldición."

“Si Dios es la infinitud y la plenitud del ser, no hay distancia entre su proyecto y su ser realidad, su voluntad es el fundamento inmóvil de su ser. Lo que quiere se hace, quiere cuanto es...”.

Como ya he escrito en algunos post anteriores, tal vez uno de los libros mas importantes de Simone de Beavoir fue el que publicó en el año 1949 y que se llamó El segundo sexo. Fue una obra revolucionaria que marcó un punto paradigmático para los grupos feministas. En este libro, la francesa hace un análisis arduo sobre las distintas formas de opresión masculina sobre la mujer. Mas de sus fragmentos y frases:

“Tal Dios no es una persona singular, es el universal, el todo inmutable y eterno. Y lo universal es silencioso... La perfección de su ser no deja ningún lugar al hombre porque el hombre no podría trascenderse en Dios si Dios ya está todo entero dado. En tal caso el hombre no es más que un accidente indiferente a la realidad del ser; está en la tierra como un explorador perdido en el desierto; puede ir a la derecha o a la izquierda, puede ir a donde quiera; jamás irá a ningún lugar y la arena cubrirá sus huellas. "

Otra de las cuestiones que Simone de Beauvoir analizó en su libro El segundo sexo, escrito en el año 1949, fue la situación de la mujer desde el aspecto bilógico, introduciendo como perspectiva de análisis el psicoanálisis y el marxismo. Cone sta teoría derribó el mito construido en torno a la mujer y alentó a que ellas mismas fueran las que buscaran su propia a liberación. Sobre ello dijo:

“La lucha para la emancipación de la mujer era distinta y paralela a la lucha de clases, y que el principal problema que debía afrontar el "sexo débil" no era ideológico sino económico”.

Junto a otras mujeres que también estaban en la lucha feminista fundó la Liga de los Derechos de la Mujer, la cual propuso incentivar y defender a las mujeres que sufrieran cualquier forma de discriminación de género. La revista Tiempos Modernos dedicó un número completo a este tema.

En el año 1954 Simone de Beauvoir obtuvo el Ganó el Premio Goncourt por su libro Los mandarines. En esa obra la pensadora francesa abordaba los problemas que generó la segunda guerra mundial respecto a los intelectuales para asumir su responsabilidad social. En el año 1966 participó en el Tribunal Russell y dos años más tarde se solidarizó con los estudiantes liderados por Daniel Cohn-Bendit. Más de sus fragmentos y pensamientos que marcaron un hito en la sociedad del siglo XX:

“Fui a buscar unas cosas en el auto; extendí una manta, almohadones, puse la radio a transistores, y fumé mientras escuchaba Mozart. Detrás de dos o tres ventanas polvorientas adivino presencias: sin duda son oficinas. Un camión se detuvo ante uno de los portones, unos hombres abrieron, cargaron bolsas en la parte trasera del vehículo. Ninguna otra cosa ha alterado el silencio de esta siesta: ni un visitante. El concierto terminado, me puse a leer”.

En el año 1972 Simone de Beauvoir fue quien se encargó de dirigir la asociación Choisir, organismo que defendía la libre contracepción. Hasta su muerte la francesa fue símbolo de lucha y defensa de los derechos humanos. Entre sus libros se encuentran Memorias de una joven formal (1958), La plenitud de la vida (1960), La fuerza de las cosas (1963), Una muerte muy dulce (1964), La vejez (1968), Final de cuentas (1972) y La ceremonia del adiós (1981). Otros de sus pensamientos y fragmentos que dan cuenta de su compromiso son:

“Doble sensación de extrañamiento: me iba muy lejos, a orillas de un río desconocido; alzaba la vista y volvía a encontrarme en medio de estas piedras, lejos de mi vida”.

“El problema de la mujer siempre ha sido un problema de hombres”.

”El secreto de la dicha en el amor consiste menos en ser ciego que en cerrar los ojos cuando hace falta”.

En cuanto a la relación que mantuvo Simone de Beauvoir con el filósofo existencialista Jean Paul Sartre, mucho se ha dicho. Aseguran que el pensador era como un niño mimado y motivado por su ego. Simone y PAul fueron una de las parejas más polémicas del siglo XX. No obstante a que muchos decían que su amor era platónico y no carnal, tuvieron una relación larga y duradera. Algunas de las frases de la pensadora francesa son:
Es absolutamente imposible encarar problema humano alguno con una mente carente de prejuicio”.

“La belleza es aún más difícil de explicar que la felicidad”.

“Encanto es lo que tienen algunos hasta que empiezan a creérselo”.

“Las arrugas de la piel son ese algo indescriptible que procede del alma”.

“No hay muerte natural: nada de lo que sucede al hombre es natural puesto que su sola presencia pone en cuestión al mundo. La muerte es un accidente, y aún si los hombres la conocen y la aceptan, es una violencia indebida”.