La influencia y captación de público que tenía el conejo de Hollywood, Bugs Bunny, era realmente increíble. Por eso en una ocasión, en que Bugs Bunny protagonizaba un capítulo junto al Pato Lucas, con el fin de competir con la popularidad del conejo el Pato Lucas termina uno de los cortos comiendo dinamita, pólvora o gasolina, salta y al fin y al cabo traga un cerillo para así explotar. Pero algunos canales decidieron no pasar estos pasajes por temor a que los niños imitaran lo que mostraba el Pato Lucas.

A mediados de 1960 comienza a transmitirse por televisión el programa El show de Bugs Bunny, el cual lo que hacía era reproducir programas y cortos de finales de los año 40. el ciclo tuvo mucho éxito, ya que como suele ocurrir con el publico de los más chicos, se renueva y logró renovar y cambiar las audiencias.