El Hombre equivocado, de Alfred Hitchock
Francois Trouffaut dice sobre Alfred Hitchock que tiene – esa voluntad feroz de retener la atención, cueste lo que cueste. La película El Hombre equivocado presenta otra forma de desarrollo; trata con personajes que, a causa de un hecho concreto, se ven obligados a hacer frente a situaciones complejas que cambian su realidad. Mezcla el suspenso y mantiene en vilo al espectador, haciendo que dude constantemente si el acusado es o no de verdad culpable.
Según Trouffaut, donde se crea un malestar, una inestabilidad y una inseguridad que convierten la situación en eminentemente dramática. Asimismo, el director juega constantemente con la “arbitrariedad”, con lo que el espectador no espera que esté en su sitio, aunque también, como él mismo considera, organiza sus intrigas a partir de una enorme coincidencia, que le suministra la situación fuerte que él necesita; lo que lo vuelve completamente estructurado a partir de su carácter inmotivado esencial.