El sol desnudo, de Isaac Asimov

En “El sol desnudo”, la novela de ciencia ficción de Isaac Asimov, el escritor estadounidense cuenta la historia de Baley, a quien llaman para que intervenga en el esclarecimiento de un asesinato. Pero el detective, llamado Baley, sufre de pánico a los lugares abiertos, por lo cual deberá, antes de aceptar la propuesta, de controlar la agorafobia, un síndrome que padecen todos los habitantes del planeta Tierra. Para realizar su investigación debe viajar hasta otro planeta llamado Solaria, en donde existe una colonización humana.

En Solaria suelen viajar los habitantes más acaudalados y poderosos de otro planeta llamado Nexon, para pasar sus vacaciones pero luego quisieron vivir en él e independizare de su lugar de origen. Pero en Solaria solo pueden vivir 20 mil personas y la mayor parte de los trabajos es realizada por robots. Y en ese contexto, los habitantes del planeta Solaria no mantienen casi contacto entre si y se comunican por medios tecnológicos, a la distancia.

En Solaria sus habitantes viven presos del pánico y no se conocen, prácticamente entre ellos personalmente, pues el terror se ha apoderado de casi todos ellos. En Solaria es donde fue asesinado Rikaine Delmarre, crimen que debe investigar Baley. Las primeras noticias de este horrendo crimen, es que la esposa del hombre es la culpable de su muerte y eso es lo que el detective de la Tierra debe investigar.

Nadie sabe de qué forma lo han matado ni tampoco el arma que usaron para llevar a cabo el crimen, y luego que numerosos pasos que va dando Baley en la investigación, logra hacerlo.

El desenlace de la novela esconde un agudo análisis sobre si los robots, que son aparatos mecánicos, pueden realmente ser asesinos seriales y ponerse en contra la de la civilización humana. Tal es el caso de otra de las sagas del escritor Isaac Asimov, como es “Primera ley de la robótica”.

Isaac Asimov fue, sin dudas, uno de los máximos referentes de la narrativa de ciencia ficción. Además de escritor, como bien se ha dicho, fue filósofo y físico humanista y basado en la teoría de la razón, lo que hacía que se opusiera con firmeza a la creencia de de la existencia de Dios, aunque respetaba al cristianismo.

Escribió numerosos libros de ciencia ficción, pero además hizo ensayos y libros en lo que desarrolló teorías físicas. Ya entrando en el último período de su vida, no dejó de crear y escribir, pero se dedicó enteramente a la no ficción, creando así “la ira de la tierra”, la cual fue la última de sus obras.

“La ira de la tierra”, escrito en coautoría con Frederik Pohl, estuvo inspirada en la depresión de Estados Unidos y en la emigración de las mentes brillantes hacia otros países en busca de mejores rumbos, y abordaba el tema del medioambiente.

Muchos estudios y análisis son los que se han hecho sobre la vida y la obra de Isaac Asimov. Es por ello que hay quienes definen a su vida en dos partes, ya que se dice que durante sus primeros tiempos se dedicó por completo a la ciencia ficción, creando cuentos breves, hasta que llegaría su tan mentada novela “Un guijarro en el cielo”, a le siguió, ocho años después, “El sol desnudo”.

A partir de 1958, su producción literaria decreció, puesto que Asimov se inclinó por el trabajo de la investigación científica. Hasta que a comienzos de la década del 80, en el siglo XX, el escritor retomó su carrera literaria publicando lo que sería el comienzo de una de sus más célebres sagas de ciencia ficción, el libro “Los límites de la fundación”.

Según consta en los registros, Isaac Asimov publicó unas 430 obras escritas, entre los que se cuentan libros de ciencia ficción, ensayos y otros abordajes de temas relacionados con la ciencia real.