JM Coetzee, un sudafricano antipático

El sudafricano J.M.Coetzee es un escritor singular y un tanto excéntrico. Desde que obtuvo el premio Nóbel de literatura en el año 2003, no da entrevistas a los medios y dice que los lectores tiene que saber de él solamente a través de sus novelas. Incluso, en el primer libro que publicó que fue “Tierra de poniente”, a mediados de la década del ’70, en el siglo XX, no le brindó información biográfica al editor.

Si bien parece ser un poco pedante y antiético con estas formas de ser que parecen disentir con la personalidad de cualquier escritor que quiere que sus libros se vendan, no loes en absoluto. Quienes han presenciado algunos de sus discursos en público saben de lo que hablo, ya que suele ser extremadamente puntilloso y amable cuando ora en un auditorio. Además, habla español e ingles a la perfección y hace que muchos olviden su falta de atención para con los lectores.

Si bien no acostumbra a responder preguntas a los periodistas, J. M. Coetzee habló con un medio cultural argentino, a propósito de realizarse la Feria del libro que se hace anualmente en ese país latinoamericano. Allí habló sobre muchas cosas, y una de ellas fue la censura:

“No sé si es una buena idea extender tan ampliamente la idea de la censura. Si uno hace esto, comienza a perder su utilidad. Los editores siempre han sido como guardianes”.

Respecto al modo de trabajar de las editoriales sudafricanas, el autor respondió: “En el caso de Sudáfrica, el control del mercado literario por editores británicos significaba que un cierto tipo de escritura sudafricana era aprobada –un tipo de escritura que era aceptable para los gustos británicos– mientras que otro tipo de escritura era rechazada: concretamente, la escritura que estaba demasiado involucrada en las especificidades de la vida social de Sudáfrica y el uso sudafricano del lenguaje”.

Es muy interesante leer lo que este escritor premiado a nivel internacional, como uno de los mejores en el año 2003, dijo en una entrevista con la Revista Ñ de Argentina con respecto a la producción de los escritores sudafricanos y los idiomas. J. M. Coetzee aseguró que “la industria editorial sudafricana en inglés comenzó a desarrollarse a partir de los años 70”, claro, seguramente cuando hizo eclosión el Tercer Mundo en el plano internacional.

También dijo que es muy bueno para los países tener una producción editorial propia y no depender de los grandes países que arcan las tendencias editoriales, aunque por otro lado, también aseguró que “por motivos geográficos, los contactos entre editores en Buenos Aires y la Ciudad de México, La Habana o Santiago de Chile son más fáciles que los contactos entre los editores de las ex colonias británicas de Australia, Nueva Zelanda, Canadá, Sudáfrica y el subcontinente indio.

Me han dado ganas de indagar sobre este autor tan enigmático. A veces los lectores no vemos con agrado este tipo de actitudes por parte de los escritores, ya que nos gusta saber de su vida privada. En el caso de John Maxwell Coetzee no hay demasiado para saber, ya que en los portales de Internet tampoco hay demasiada información acerca de él.

Pero algo he sacado en limpio e intentaré compartirlo con ustedes: nació en Sudáfrica, como saben, en el año 1940 y adquirió la nacionalidad australiana y es el cuarto ciudadano africano que ha sido galardonado con le premio Nóbel de Literatura. Además también recibió otros premios como Booker (en dos oportunidades) y el Jerusalén.

Entre su bibliografía se encuentran los libros “Vida y época de Mikel K”, que cuenta la historia de un hombre que sobrevivió a la terrible guerra civil de Sudáfrica. También está el libro “Desgracia” que cuenta la vida de un docente de letras que queda fuera del circuito de trabajo por ser apuntado como acosador sexual.