Cumbres borrascosas, de Emily Brontë

Una de las escritoras más célebres del siglo XIX y también una de las más osadas en su tiempo fue Emily Brontë, autora de la no menos emblemática novela “Cumbres borrascosas”.

El libro cuenta una triste historia teñida de tragedias y mentiras que comienza cuando un niño huérfano y desconocido es acogido en una casa de familia. Nadie sabe la procedencia del niño quien, con el paso de los años y tras recibir durante la infancia y la adolescencia continuos desprecios por parte de los integrantes de la familia, se convierte de adulto en un ser deleznable.

Heathcliff es el nombre de este niño que se va del hogar adoptivo siendo joven y regresa convertido en un adulto refinado pero con ansias de venganza y es por ello que su única intención es destruir a los que quedan vivos de su antiguo hogar.

Es un relato teñido de enfermedades, odios, venganzas y ardides que parte de la mente siniestra del “pequeño Heathcliff”.

La vida de Emily Bronte estuvo marcada por las desgracias, del mismo modo de que la de sus hermanas y también al de su único hermano quien murió de pequeño. Ella murió a los 30 años y “Cumbre borrascosas” es el único libro que ha escrito, lo que es realmente lamentable, puesto que hasta hoy está vigente y es un clásico de la literatura universal.

Dada su notoriedad y su calidad, este libro fue llevado al cine en varias oportunidades, con éxitos rotundos, hasta en versiones de cine mudo. Una de las mejores versiones fue en 1939, ocasión en la que estuvo dirigida por William Wyler. Hasta el mismo Luis Buñuel hizo una adaptación para una novela mexicana, con su particular estilo, en 1953.

Así, los personajes emblemáticos creados por la inglesa no sólo han quedado inmortalizados en su libro sino también en diversas versiones para las pantallas grandes y chicas de todo el mundo.

La mayor de las hermanas Bronté, Charlotte, también es autora de un libro que es considerado un clásico de la literatura universal, me refiero a “Jane Eyre”. En esta novela la escritora cuenta la vida de una niña que ha perdido a sus padres y es por ello que estudia en un orfanato en donde no pasa días felices, por el contrario, ya que las celadoras y profesoras se encargan de que tenga una vida miserable.

Pero Jane es una niña que aspira a ser alguien en la vida y traspasa la indiferencia y la maldad del orfanato, hasta que entra en la adolescencia y comienza a trabajar como institutriz. Teñida de drama, la novela gira en torno al amor que la joven aya siente por el padre de la niña a quien cuida, pero lo que no sabe es que este hombre no es viudo, sino que tiene a su esposa, quien está loca, encerrada en un cuarto de la casa.

Charlotte Brontë vivió una vida similar a la de Jane Eyre, la protagonista de su novela más célebre, ya que ella y sus hermanas perdieron a su madre siendo muy pequeñas y también debieron estudiar en un orfanato en donde tampoco la pasaban demasiado bien. Sus hermanas y un hermano menor murieron muy jóvenes y Charlotte decía que las enfermedades contraídas y su salud vulnerable eran a causa de las malas condiciones del colegio pupilo en donde habían crecido.

Charlotte fue maestra y entre sus obras se encuentran “Poesías”, libro escrito en coautoría con sus hermanas Emily y Anne. Luego quiso publicar una novela llamada “El profesor” pero no consiguió mecenas ni sello que quisiera publicarlo. Más tarde sí pudo lanzar “Jane Eyre” y en 1848, el año en que murieron su hermana Emily y su hermano, hizo lo mismo con el libro “Shirley”. El último libro de su autoría sería “Vilette”.