Demian, de Herman Hesse

“Demian” es el nombre del personaje que da título a la novela de Hermann Hesse, la cual publicó el autor, en su primera aparición, con el seudónimo de Emil Sinclair. En este libro el experimentado escritor trata sobre la vida de un niño que está entrando en la adolescencia. A su vez, Emil Sinclair es el nombre del joven que, hablando en primera persona, contará acerca de los caminos que irá andando en la vida.

Este jovencito vivió en una especie de mundo idílico, que en el idioma del autor se le conoce como “el Scheinwelt”, pero para hacer que el niño salga de ese encierro le mentirán, al tiempo que aparece en su vida Max Demian, un extraño personaje que lo acompañará por caminos espirituales, haciéndole pensar y reflexionar acerca de las cosas materiales a las que el joven estaba aferrado. Es un libro plagado de filosofía y de ciertas teorías psicoanalíticas.

“Demian” se publicó, bajo el seudónimo de Emil Sincalir, en 1919, apenas terminaba la Primera Guerra Mundial. En esa ocasión, el libro tuvo una gran repercusión ya que se estaba en un proceso de conmoción debido al conflicto que había enfrenatdo de manera sangrienta a muchos países de Europa.

La novela fue ponderada por los intelectuales de la época, quienes aseguraban que se convertiría en un modelo y en un clásico inevitable de la literatura universal. Debido al éxito, recibió el galardón "Fontane", que estaba preparado para aquellos escritores que recién se iniciaban en el camino de la literatura profesional, aunque este detalle quedó para la historia como una anécdota graciosa, ya que le otorgaron ese previo porque Hesse la había publicado con un seudónimo desconocido y no sabían que era de su autoría, así fue que, al darse a conocer como el autor de la obra, Hermann Hesse devolvió el galardón.

Hans Giebenrath es el personaje principal de la novela titulada “Bajo las ruedas”, de Herman Hesse. Este libro cuenta la vida de un niño a quien le roban su ingenuidad y su infancia.

Con bastante de autobiográfico Hesse relata que al niño, tras perder a su madre, retoca vivir con su padre en el campo, sin tener acceso a los lujos y debiendo trabajar a la par de su progenitor. De este modo, la vida del jovencito comienza ser un verdadero suplicio cuando lo obligan a estudiar y relegar su tiempo de juegos, a tal punto que deciden enviarlo a un seminario en donde va cambiando su carácter haciéndose más huraño, malhumorado y acumulando odio y resentimiento hacia la sociedad.

En este libro Hesse realiza una aguda crítica a la educación y sus formas de aplicarla en los jóvenes, sosteniendo con ejemplos que muchas veces dejan de lado al individuo para centrase solamente en la incorporación de conocimientos.