Hace algunos años nadie creía que un libro podía convertirse en un formato electrónico de fácil acceso para una generación que día a día se convertía en una generación de la era digital.
Hace mucho que venimos discutiendo sobre el futuro del libro, del papel, qué pasará, dónde irá a parar, qué haremos sin libros, son muchas e innumerables las preguntas y pocas las respuestas.
Más allá de las reuniones entre especialistas, bibliotecas mundiales, conferencias, congresos, etcétera, nadie todavía ha dicho con claridad qué pasara con el libro, seguirá existiendo o se convertirá en una producción digital más. Yo no lo sé, creo que nadie lo sabe, creo que habrá que dejarse llevar por las redes del tiempo y mirar atentos en qué evolucionará el libro. Es imposible detener el paso del tiempo y más aún la evolución del libro no sabemos qué pasará pero hay que estar atentos.
¿Qué les parece a ustedes? ¿El libro seguirá su curso normal o se convertirá en una producción digital?
Yo no sé si debería plantearse la discusión mediante la dicotomía libro/producción digital, creo que la primera se complementa con la segunda y viceversa, ya que no hay olvidar que hoy en día vivimos en una era digital mediatizada y escapar de ella sería casi imposible, ya que el tiempo no se puede detener y mucho menos los avances tecnológicos.
A lo mejor es hora de que debamos dejar de lado las dicotomías y ponernos a ver en lo fructífero que traerá formar para de la era digital, ya que no sólo se seguirán vendiendo libros sino que llegarán a todo el mundo que tenga una computadora o internet. De esta manera, cualquier escritor de cualquier parte del mundo podrá publicar su obra en un formato electrónico y de ésta manera cualquiera podrá leerlo y si eso no es positivo y bueno para la literatura del porvenir algo estamos haciendo mal.
Marcadores