Rayuela es uno de los íconos narrativos de Latinoamérica, de la década del ’60 en el siglo pasado. Es una mezcla de las costumbres argentinas con esa corriente nacida en ese siglo que fue el surrealismo.

En Rayuela, Julio Cortázar acomoda, amalgama, crea un mundo desordenado porque lo que desea, en realidad, es disolver el amor o mostrarlo de una manera distinta a la convencional. Allí es que el autor introduce lo mágico que logra cambiar el mundo real.

En el relato hay una muerte que marca un hito en esa historia, puesto que ocurre en un momento en que no debería ocurrir una muerte, como es el caso del deceso Rocamadour. Otra característica particular en Rayuela es el abordaje del sexo y de las relaciones amorosas en el que Maga, la dama del relato, juega un papel fundamental.

Hay otras obras de Julio Cortázar que también han marcado hitos en la narrativa latinoamericana, como son sus cuentos Casa tomada o Cirse y algunos otros que en este momento no recuerdo su título pero les aseguro, que tengo muy presentes sus tramas fascinantes y escritas de manera impecable.