Las declaraciones contundentes de los testigos que son protagonistas de la película El hombre equivocado, quienes señalan a Cristopher como culpable, a causa de su parecido con el verdadero ladrón, son los ingredientes que Hitchock arma a modo de rompecabezas.
Otro punto relevante de su cinematografía, son las fobias y trastornos psíquicos de sus personajes. Un eje fundamental en todas sus producciones. A saber, la personalidad atormentada de Norman Bates, en Psicosis, quien sufría de un extraño caso de doble personalidad y donde él mismo era su madre que a la vez le “ordenaba” impartir justicia. El trastorno de la esposa de Cristofer Balletros en El hombre equivocado, ponen también su sello indiscutido. La escena donde Rosa le pega con el cepillo en la frente al personaje principal, vislumbra la “perturbación” continuamente utilizada por el director. Si no la han visto aún (aunque la deben y tienen que haber visto) realmente se la recomiendo porque muestra una de las mejores producciones de Alfred Hitchock.
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